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• Redacción
• 16 agosto 2021

Para el profesor Elieser estar orgulloso de sus raíces indígenas es muy importante; por ello ha enseñado a sus alumnos a vestirlos trajes tradicionales de la región de la Mixteca.

Comparte que desde hace varios años ha rescatado el traje tradicional de la región Tacuate, pues él trabaja en el municipio de Santa María Zacatepec, cuyos habitantes lo han ayudado a investigar y a implementar una regla en clase: todos los niños deben portar el huipil o camisa típica de ese lugar.

El profesor relata que por años, el considerarse Tacuate era una ofensa por las ideas que había, además que usar la indumentaria típica, es decir huipil blanco con pequeñas aves rojas en el pecho, era motivo de vergüenza.

“Había ideas de que era malo usar la ropa porque te señalaba como un indio, esto de una forma despectiva”, lamenta.

Por ello implementó que tanto los niños, cómo él, debían asistir a clases usando sus trajes tradicionales para comenzar a tener orgullo de formar parte de esta raza étnica.

“Al principio había resistencia, pero ahora los niños ya quieren huipiles o trajes porque antes se avergonzaban de ser tacuates, pero gracias a esta iniciativa, estamos recuperando varias tradiciones que se habían perdido”, manifiesta.

Elieser menciona que en el caso de los jóvenes casi no utilizaban los trajes, pero ahora que hay un “boom étnico”, aunque no se portan los trajes tradicionales, se optó por ropa más estilizada y con algunos toques de la región.

“Quizá ya no usan la camisa de manta, sino que ya es con representación de los bordados, por ello, lo que hemos hecho es que el alumno elija lo que quiere utilizar, pero enfatizando que se debe hacer la idea que es parte de su costumbre ver y apreciar lo que es el valor y trabajo que tiene su ropa”, destaca.

El maestro afirma que antes, sus alumnos decían que no utilizarían el huipil porque son caros, pero ahora esa mentalidad ha cambiado, pues saben el por qué tienen ese costo, eso gracias a que han investigado el proceso de creación.

Asimismo, comenta que a través de ese impulso, han ayudado y elaborado algunas piezas con sus alumnos, que, aunque no tienen conocimiento de bordado, han conseguido hacer al menos unos pañuelos. “Inclusive rescatamos unos patrones de bordados que ya hemos utilizado en la indumentaria propia de la región Tacuate”, asegura.

Elieser González agrega que desde hace un año se integró a un grupo folclórico que es contratado para interpretar la Danza de los Diablos, por lo que ha recorrido varias comunidades de la Mixteca y también ha visitado otros estados de la república.

“Al principio sólo asistíamos a las fiestas patronales, pero ya es diferente. Nos han invitado a ir a los eventos sociales porque la danza ha sido del agrado de las personas”, explica.

Detalla que la Danza de los Diablos representa la alegría del diablo por llevarse el alma de los moros, quienes también tienen su danza en el carnaval de Juxtlahuaca.

El maestro afirma que estas actividades son para mostrar la cultura que tiene la región de la Mixteca y Oaxaca, además de que los niños y jóvenes se sientan orgullosos de pertenecer a estos lugares.

¿Qué es la Danza de los Diablos?

También conocida como los Pachecos, es una de las danzas que se bailan dentro del carnaval de Santiago Juxtlahuaca.

Los Diablos son una muestra auténtica y bravía de los hombres de Juxtlahuaca, en la región Mixteca baja, quienes al terminar su jornada de
trabajo, alrededor de una fogata, entre trago y trago de aguardiente, y a los sones del violín y la jarana, bailan y comentan las peripecias sufridas durante el trayecto en el arreo del ganado, desde la Costa oaxaqueña hasta El Parían, o de otros lugares donde lo embarcan.

Tacuates

Son una etnia descendiente de los Mixtecos que, a pesar de hablar una lengua mixteca, mantienen una identidad étnica distinta.

Los tacuates habitan en la región de la Mixteca de la Costa de Oaxaca en el municipio de Santa María Zacatepec, del distrito de Putla, Oaxaca.