"Rusia no es el vecino que pensábamos que era": cómo la guerra en Ucrania ha hecho que más gente en Finlandia y Suecia quiera unirse a la OTAN
Explicó que la medida tendría un impacto muy sustancial y que las sanciones serían "extremadamente duras".
Pero tras la decisión del presidente de Rusia, Vladimir Putin, de invadir Ucrania, con el pretexto de "pacificar" el país, su visión ha dado un giro drástico.
Este miércoles, Finlandia lanzó un debate que podría resultar en que la nación nórdica solicite unirse a la alianza en cuestión de semanas.
La vecina Suecia dio un giro similar, cuando el gobernante Partido Socialdemócrata, que siempre se opuso a sumarse a la OTAN, reveló que está reconsiderando su posición tras el ataque de Rusia.
"Cuando Rusia invadió Ucrania, la posición de seguridad de Suecia cambió fundamentalmente", explicó el partido dirigido por la primera ministra sueca, Magdalena Andersson, en un comunicado este lunes.
Moscú ha dejado claro que se opone a cualquier ampliación de la alianza.
El portavoz de Putin, Dmitri Peskov, advirtió que el bloque "no es ese tipo de alianza que garantiza la paz y la estabilidad, y su mayor expansión no traerá seguridad adicional al continente europeo".
La semana pasada, Peskov amenazó que Rusia tendría que "reequilibrar la situación" con sus propias medidas si Suecia y Finlandia se unieran a la OTAN.
Y en febrero, Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, advirtió sobre las "consecuencias políticas y militares" si los países se unían al bloque.
"Dentro de unas semanas"
Pese a las múltiples advertencias rusas, Robert Dalsjö, analista de asuntos político-militares del Instituto Sueco de Investigaciones para la Defensa, afirma que Finlandia está determinada a unirse a la OTAN y ha comenzado un proceso rápido y organizado para lograrlo.
"Ya no se habla de meses, sino de semanas, y Suecia está tratando de seguir a Finlandia en el proceso", le dice el experto a BBC Mundo.
El diario sueco Svenska Dagbladet reportó este miércoles que la primera ministra de Suecia estaba decidida a enviar una solicitud para unirse a la OTAN y que su gobierno planeaba presentar la petición en la cumbre de Madrid que la alianza militar espera celebrar a finales de junio.
Este informe se reveló el mismo día en que las mandatarias de Finlandia y Suecia se reunían en Estocolmo, la capital sueca, para discutir asuntos de seguridad regional tras la invasión rusa de Ucrania.
Después de la reunión, Sanna Marin, confirmó que su país decidirá si solicita unirse a la OTAN "dentro de unas semanas".
"No daré ningún tipo de cronograma sobre cuándo tomaremos nuestras decisiones, pero creo que sucederá bastante rápido", puntualizó.
Semanas antes, Marin justificó su cambio de opinión respecto a la OTAN asegurando que "Rusia no es el vecino que pensábamos que era".
Fin de la neutralidad
Tradicionalmente, en Finlandia y Suecia siempre hubo una fuerte oposición generalizada a unirse a la OTAN.
Los suecos simplemente querían seguir ejerciendo su famosa neutralidad, mientras que, desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, Finlandia se vio en la necesidad de convencer a la Unión Soviética de que no era una amenaza para esa potencia y adoptó una postura de "finlandización".
En el pasado, Rusia ya había invadido Finlandia en varias ocasiones e incluso la anexó como un ducado autónomo desde inicios del siglo XIX hasta 1917. La última invasión fue en noviembre de 1939, pocos meses después del inicio de la Segunda Guerra Mundial, en la que se llamó la Guerra de Invierno.
Pero la resistencia militar a la invasión y luego la llamada "finlandización" le permitió al país permanecer libre de la dominación soviética y del comunismo.
Finlandia se mantuvo neutral en términos militares y de política exterior, sin sumarse a la OTAN pero tampoco al Pacto de Varsovia, pese a que Moscú quería que se incorporara a su alianza.
En el espejo de Ucrania
En ambas naciones, el apoyo público a una membresía de la OTAN ha aumentado drásticamente en los últimos meses.
Aunque antes la mayoría dudaba o simplemente se oponía, ahora cerca del 60% de los finlandeses y alrededor del 50% de los suecos ahora la apoya, según varias encuestas.
Para Robert Dalsjö, el cambio se debe a que "la agresión de Putin contra Ucrania" le ha dado a la gente un indicio de lo que Rusia es capaz de hacer en países vecinos.
Dalsjö explica además que muchos en Finlandia y Suecia se han visto en el espejo de Ucrania y temen que les pase lo mismo si Rusia decidiera atacar a sus países.
"Ucrania ha estado recibiendo apoyo militar, económico y moral, pero ningún país (de la OTAN) irá a la guerra por otro que no es miembro", explica el experto sueco.
"Sería fantástico"
Ivo Daalder, especialista en seguridad europea y presidente del Consejo de Asuntos Globales de Chicago, está seguro de que todos los países de la OTAN recibirán con las manos abiertas las solicitudes de adhesión de Finlandia y Suecia.
Comentarios