• Opinión

• Redacción
• 17 enero 2021

Por José Luis Camacho Acevedo

Seamos realistas. Estados Unidos y su política de inmiscuirse en asuntos interno del resto de los países no va a cambiar.

Para lograrlo, ya sea con Trump o Biden continuarán ocupando todos los sistemas de inteligencia que tienen a su alcance para espiar a sus gobiernos, funcionarios, empresarios, periodistas, etc.

México es uno de los países en los cuales Estados Unidos ha extendido una de las más grandes redes de espías y equipos de inteligencia para enterarse de todo lo que tiene relevancia para ellos, con la finalidad de contar con información que le permita conocer los movimientos estratégicos de los estados nacionales.

Todo lo anterior se realiza al amparo de la política de control de drogas que comenzó en la administración de Ronald Reagan.

A pesar de que, a principios del pasado mes de diciembre, el Senado de la República aprobó la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador para modificar la Ley de Seguridad Nacional que “busca poner orden” en la actuación de agentes extranjeros en México.

Pocos días después se dio a conocer que la DEA planeaba expandir sus actividades en México para 2021 con la creación de tres nuevas plazas de agentes especiales y la compra de un avión espía.

Así es la agencia antinarcóticos pidió al Congreso de EU una partida de 1.5 millones de dólares para la creación de tres plazas para agentes especiales que trabajarán en las oficinas que tienen desplegadas en México y Centroamérica, y que se sumarán a los 54 agentes que operan en territorio nacional en 10 oficinas repartidas de Tijuana a Mérida.

En la propuesta de presupuesto, la DEA también pide recursos para financiar la compra de un avión King Air 350 por 9.2 millones de dólares, que será usado para labores de espionaje e intersección para combatir a los cárteles en México y otros países de la región donde desde hace años han acumulado influencia.

Lo anterior, reafirma la tesis de este texto, la DEA continuará haciendo caso omiso al mensaje del gobierno mexicano de poner un alto a las actuaciones clandestinas que por décadas han realizado sus elementos encubiertos en nuestro país, incluyendo por su puesto, la detención del general Salvador Cienfuegos.

La más somera revisión al comportamiento histórico de las intervenciones de agentes de la DEA en México, violando el tratado correspondiente a la prohibición de portar armas en nuestro territorio, presenta, tomando como referencia el caso de Enrique, el Kiki Camarena Salazar y su presunto asesinato a manos de la organización del ahora prófugo Rafael Caro Quintero, crea una narrativa de transgresiones inaceptables a la soberanía nacional.

La decisión de la Fiscalía General de la República a cargo del Doctor Alejandro Gertz Manero de absolver al general Salvador Cienfuegos de las acusaciones de tener presuntas ligas con el narco, dio pauta al presidente López Obrador para que, por fin, un mandatario mexicano se resolviera a llamar las cosas por su nombre al señalar que la DEA fabricó la presunta relación del ex secretario de la defensa nacional con el crimen organizado.

Cito textual:

“Nosotros sostenemos que debe de terminarse la impunidad, desde luego la corrupción, pero también que no puede haber represalias, venganzas y que no se pueden inventar delitos, que nadie debe actuar de esa manera, trátese de quien se trate. Lo más importante es la verdad y la justicia”, afirmó el mandatario.

Las modificaciones aprobadas por el Senado tienen como finalidad proteger la soberanía nacional y fortalecer los principios de reciprocidad entre México y otras naciones.

En este sentido, Ricardo Monreal, líder de la bancada de Morena informó sobre la publicación en el Diario Oficial de la Federación, de las reformas a Ley de Seguridad Pública antes mencionada.

Entre las novedades que veremos ahora en la nueva ley publicada en el DOF, al acreditarse el ingreso de los agentes, se les registrará como funcionarios consulares por la Secretaría de Relaciones Exteriores, de Seguridad y Protección Ciudadana, de la Defensa Nacional y de Marina.

Adicionalmente, de manera mensual, las embajadas acreditadas en México deberán informar a las instancias correspondientes las actividades desarrolladas por los agentes, como parte de los acuerdos de cooperación bilateral en materia de seguridad, que contribuya a preservar la seguridad nacional.

Los reportes de los agentes ya no serán solo para conocimiento de sus países de origen. Ahora deberán informar a las autoridades mexicanas sobre cualquier tema que represente una amenaza para la seguridad nacional o sobre personas que realicen actividades delictivas.

Del asesinato del agente encubierto Enrique Camarena y los sangrientos hechos que siguieron, al caso del general Salvador Cienfuegos y la llegada al poder de López Obrador, pone un antes y un después ante las actuaciones arbitrarias y fuera de los acuerdos bilaterales que cometen los agentes norteamericanos y quienes los dirigen en México.

EN TIEMPO REAL

1.- Le meten gol a Pedro Haces en Querétaro. El pillo de José Luis Aguilera Rico, que en realidad es un operador encubierto del gobierno panista de Francisco Domínguez, le está metiendo un golazo al partido Fuerza por México que encabeza Gerardo Islas y cuyo líder moral es el dirigente obrero Pedro Haces.

“El dirigente estatal” Aguilera Rico, es ampliamente conocido en Querétaro por ser un consumado vendedor de candidaturas. Ha convertido en un espléndido negocio el apoderarse de partidos nuevos. Después buscar presupuesto y ya con el efectivo en la bolsa, lo ahorra para él mismo. No lo aplica jamás a campañas electorales. Es un comentario generalizado que tanto Pancho Domínguez como Luis Nava, actual alcalde de la capital, le dieron recursos para fundar Fuerza por México y así convertir a la organización en un simple satélite del PAN.

Sonado es el caso de José Pérez Hermosillo, quien fue candidato a alcalde de Querétaro por el partido Convergencia, y a quien Aguilera le dio 2 millones de pesos en utilitarios del partido con la condición de que se los devolviera en efectivo. Con esas dirigencias Fuerza por México corre el grave riesgo de no alcanzar el 2% de la votación nacional que requiere para consolidar su registro definitivo.

2.- Los partidos políticos que integran la coalición Unidos por Tlaxcala postularon por unanimidad a Anabell Ávalos Zempoalteca como candidata a la Gubernatura del Estado para el proceso electoral ordinario 2020-2021.

En conferencia de prensa virtual, los dirigentes de los Partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD), Alianza Ciudadana (PAC) y Socialista (PS), José Gilberto Temoltzin Martínez, Noé Rodríguez Roldán, Julio César Pérez González, Serafín Ortiz Ortiz y Patricia Zenteno Hernández respectivamente anunciaron que la decisión fue tomada en consenso.

Reconocieron el profesionalismo, integridad y compromiso de la senadora Minerva Hernández Ramos, quien participó en el proceso de elección del abanderado de la coalición y quien junto con Anabell Ávalos firmó hace unos días un pacto de civilidad.

3.- Camina bien el proyecto que tiene Mikel Arriola Peñaloza como nuevo mandamás de la LigaMX del futbol mexicano. El ex director del IMSS y de la Cofepris es un consumado deportista, jugador non de pelota vasca, que conoce a fondo el problema de todas las federaciones deportivas del país. Mikel Arriola tiene como gran reto preparar al futbol profesional para el retorno en su momento de los aficionados a los estadios.

Sin duda que el balonpié es el deporte preferido en México y por lo tanto lleva una gran carga del estado de ánimo nacional. Como siempre lo ha demostrado, Mikel Arriola pondrá su profesionalismo y su reconocida honestidad, al servicio del futbol nacional.