• Opinión

• Redacción
• 06 septiembre 2021

Por: Alex Gómez

Cómo le va, se ha ido una semana más así de rápido y hay muchos temas sobre la mesa que trataré de abordar brevemente, pero de la manera más clara posible.

EL fallido regreso a clases, el tercer informe de gobierno de un presidente solitario, celebración del día del presidente con más ego que logros, pero eso sí, el único que no se vende en la 4T, es y será el avión presidencial; y finalmente, el regreso a semáforo amarillo en la Ciudad de México y en muchos estados de la República, una forma de aniquilar mexicanos sin armas.

El pasado 30 de agosto, en México más de 25 millones de estudiantes regresaron a clases presenciales desde educación básica hasta educación superior en medio de la ausencia de medidas sanitarias y servicios en las escuelas para procurar la salud de los estudiantes en las aulas de clase.

EL presidente Andrés Manuel López Obrador ha insistido que las condiciones son seguras, sin embargo, las cifras (las verdaderas, de los otros datos que él no tiene), indican que hasta el 22 de agosto había en México 258 mil fallecidos por Coronavirus entre las que destacan 640 muertes de menores de edad y más de 64 mil contagios en esa semana.

Al menos tuvieron la decencia de retirar la repulsiva carta-compromiso sanitaria que estaban obligados los padres de familia a firmar para deslindar a las autoridades de salud y de la SEP, o sea al gobierno federal, de su responsabilidad constitucional de brindar salud y educación a los mexicanos.

Lo cierto es que la secretaria de educación pública, Delfina Gómez, no ha aceptado que ha sido una necedad regresar a clases, pero tampoco ha hecho un pronunciamiento público en el que la SEP se comprometa a proporcionar los elementos necesarios para cuidar de la salud de los estudiantes como lo son el alcohol en gel, desinfectante, termómetros, cubrebocas, mascarillas de acetato, ni tampoco las pantallas acrílicas para pupitres, en fin nada.

La comunidad universitaria del Instituto Politécnico Nacional como de la UNAM, decidieron seguir con clases a distancia para preservar la salud de los universitarios. Una excelente decisión.

EL tercer informe, a mitad del camino dice el presidente y se confirma, como mula necia, se ha plantado a la mitad del camino, ni avanza ni deja de avanzar, ahí está, vestido de su necedad.

Confirmo lo dicho por José Luis Camacho en su columna del 23 de agosto, que el Día del Presidente fue anticlimático y están dejando sólo a Andrés Manuel, los intereses fácticos y políticos de los “fundacionalistas” versus lopezobradoristas ha empezado una guerra encarnizada por posiciones. La llegada de Adán Augusto López, viene a confirmar el manotazo del presidente en el Gabinete.

La desaceleración económica hace que los sectores productivos tengan cada vez más desconfianza, tanto en lo nacional como en lo internacional, pero el colmo de los colmos fue atribuirse como logro de gobierno el aumento del envío de reservas de los connacionales de estados unidos hacia México, no tiene mmmm… nombre.

Pero esos 4 mil 540 millones de dólares de remesas que literalmente, le caen como anillo al dedo al gobierno federal, vienen a facilitarle las cosas para seguir pidiendo préstamos al Fondo Monetario Internacional, mientras que para finales de junio de 2021 la deuda externa ascendió a 226 mil 818 mdd y sigue creciendo.

El Banco Mundial ha aprobado ocho préstamos al gobierno de México desde marzo de 2019 a la fecha, periodo que comprende los primeros tres años de la administración de Andrés Manuel López Obrador.

De estos financiamientos sólo cinco se encuentran activos, por un monto de MIL 955 millones de dólares y son apoyos dirigidos y etiquetados a proyectos de desarrollo económico y social.

El más reciente, aprobado en enero de 2021, es por un monto de 225 millones de dólares y está dirigido a diseñar el Sistema Nacional de Identidad Única Digital, mismo que ha sido duramente criticado por la vulnerabilidad que presenta respecto de los datos biométricos de los mexicanos, como si de un Big Brother nacional se tratara.

Mientras que Palacio Nacional y su partido, Morena, siga con la política de agredir a medios de comunicación y sectores productivos, el gobierno de López Obrador será estigmatizado como el mesías que tenía todas las soluciones y el presidente de todos los pretextos.

Olvídese de Morena, esa cloaca está a punto de estallar, le quedan algo así como 18 meses para que fundacionalistas se enconen con los lopezobradoristas, ya lo verá.

Mientras seguiremos con las misas mañaneras del párroco que nadie pela y todo mundo se burla sin que al terminar su administración, haya logrado erradicar la corrupción, promesa a todas luces incumplida y que no cumplirá.

Y pues con la novedad de que este lunes 6 de septiembre, o sea hoy, regresamos a semáforo sanitario color amarillo, es decir, aquí no pasa nada, abran todo que ya urge el pago de impuestos y generación de riqueza porque el gobierno no se mantiene solo.

Digamos que para el gobierno, los estudiantes de primaria, secundaria y hasta bachillerato, incluyendo a docentes, directivos y personal de apoyo a la educación que fallezcan, serán mero daño colateral, que seguramente les caerá también como anillo al dedo.

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