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• Redacción
• 16 noviembre 2021

Dentro de las instalaciones de la Secretaría de Gobernación, se haya una persona que goza de sueldo sin trabajar, dicha persona es Patricia González Miranda, quien desde el primero de abril del año 2020 tiene a su cargo el puesto de Sub directora de Recursos Presupuestales, adjunta a la Sub Secretaría de Gobierno, con la matrícula 04-200-1-M1C017P-000136-E-G-C subordinada directamente con el director Administrativo de la oficina del Sub secretario.

Lo más penoso de Patricia, es no estar en spots publicitarios de candidatos a gobernador, como sucedió en el anterior proceso electoral, mucho menos realizar actividades partidistas a favor de MORENA, pues ella solo se limita a funciones de administración las cuales son: revisar los procesos a la presupuestación, inspeccionar y procurar el presupuesto de la subsecretaría de gobierno, así como, el aseverar la gratificación en tiempo de los recursos financieros a los módulos competentes para secundar  su correcta operación en el ejercicio.

También, estaría a cargo de sistematizar la integración de documentos en la comprobación de los gastos de los módulos de la Secretaría de Gobernación para armonizar las cuentas bancarias y la planeación del gasto-presupuesto, entro otras actividades estipuladas por la misma Dirección General de Modernización, Organización y Eficiencia Administrativa.
En diversos documentos presentados por González Miranda ante la Secretaría de la Función Pública, se desmaraña que esta “bajo protesta  de decir la verdad”, sin embargo, no es en este caso, ya que el domicilio donde supuestamente trabaja está ubicado en la Calle Abraham González Número 48 en la delegación Cuauhtémoc en la Ciudad de México con número de teléfono 55 51280000 ext: 59203, en ningún momento se ha presentado en dicho lugar, lo mismo pasa con la extensión, la cual se encuentra concedida a otra persona.
Otra situación delicada en la que se encuentra Patricia González es el contradecirse en lo que respecta con las funciones asignadas del puesto que previsiblemente ocupa; ya que en un documento exhibido ante dicha institución el día 23 de julio de 2021 expresa que su función es “la verificación de manifestaciones en la entidad y conciliación con partidos políticos”.

Dicho de otra forma, estos actos le repercutirán a González Miranda de manera penal y también para el superior jerárquico.

Otro de los temas con Patricia González es su “salario”, dicha funcionaria obtiene un ingreso de $54,445 pesos mensuales, es decir, anualmente obtiene $653,340 pesos. 
Pero, tan solo por el “pobre” concepto de prima vacacional recibe $18,148 pesos (2 veces al año); Un aguinaldo de $72,593 pesos, un seguro de vida por la modesta cantidad de $2,177,800 pesos, por último, un seguro de retiro por $25,000 pesos mensuales.

En lo que respecta al sueldo y todos los beneficios que está teniendo sin trabajar, Patricia González, está cómodamente de aviadora en el Gobierno Federal. 
En el pasado proceso electoral en el estado de Querétaro, Patricia González Miranda fue candidata a regidora por los principios de mayoría de representación proporcional por la capital queretana, con su partido MORENA, sin embargo, sin pedir licencia al cargo que arroga, solicitó una carta de residencia ante la Secretaría del Ayuntamiento de Querétaro, donde expresó tener un inmueble con dirección en la capital queretana desde hace más de 30 años, mismo patrón que hizo en la Ciudad de México ante las instituciones federales para la obtención de un cargo.

Las irregularidades y mentiras no terminan aquí, aún hay más, ahora toca el turno de la formación académica, pues en el CV presentado en 2020 para obtener el cargo, declaró contar con una maestría en 2001 y un doctorado en 2020 por IEXE; La declaración patrimonial del 23 de julio de 2021, en el escrito dice ser egresada de la Escuela de Políticas Públicas y  de esta forma adquirir el título de “maestra”, no así el doctorado que aún sigue cursando, a pesar de que el día primero de abril de 2020 se exhibió como “doctora”.

Como si se tratase de la célula criminal, dentro de las oficinas de la Subsecretaría de gobierno se han cometido caprichos, excentricidades y desvaríos de manera personal, esto por las alteraciones de recursos federales, puesto que alguien necesariamente debe realizar dichas funciones administrativas de “planeación del presupuesto” de la Subsecretaría de Gobierno y entregarlas al jefe inmediato, que dicho jefe dice “no conocerla”.

Con información del periodista  a Alejandro Olvera /La Cruda Verdad