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• Redacción
• 11 agosto 2021

Desde el año 2014 a la fecha, en Zacatecas se tiene el registro de 84 niñas, niños y adolescentes en condición de orfandad por feminicidio. La entidad ocupa el lugar 13 en este delito.

El Estado debe responder y garantizar que las niñas, niños y adolescentes, tengan restitución de sus derechos, pues se les quita la oportunidad de crecer en un entorno familiar sano con su propia madre, destacó Martha Berenice Vázquez González, Fiscal Especializada de Derechos Humanos, Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Zacatecas (FGJEZ).

La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), informó que durante los meses de enero y mayo se registraron seis feminicidios, uno de ellos en contra de una menor de edad; además el feminicidio infantil ha tenido un aumento de 13.5 por ciento, pues de cada 10 feminicidios a nivel nacional uno es en contra de niñas o adolescentes informó la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).

Sofía, de 12 años fue asesinada en noviembre del 2020, fue asfixiada y presentaba huellas de violencia sexual, un caso similar al de San Juana de nueve años asesinada en julio del 2018, dos niñas zacatecanas víctimas de la violencia más extrema.

La violencia feminicida es la más extrema, una expresión de la violencia misógina y machista “las matan simplemente porque pueden, porque es un símbolo del propio poder que ejercen los victimarios sobre el cuerpo de una mujer aunque sea una niña y donde las vulneran de las peores formas posibles”, destacó Vázquez González.

Existe una gran inconciencia de quien se atreve a arrancar la vida a una mujer o a una niña en esas condiciones, porque el feminicidio no es simplemente la muerte como lo han hecho creer incluso algunos juristas, la realidad es que se trata del asesinato por el simple hecho de ser mujeres, añadió.

Los apoyos hacia las víctimas son limitados, pues el presupuesto que anualmente se destina es sumamente bajo en la entidad al contar con 0.014 por ciento sobre el presupuesto de egresos programable, es decir, cerca de tres millones de pesos para brindar atención a todas las víctimas de todos los delitos y además para atender las recomendaciones de derechos humanos.

“Con el índice delictivo que tenemos de homicidios y feminicidios en el estado ni siquiera para esos dos delitos alcanza para brindar la atención debida y diga”.

Las niñas, niños y adolescentes en condición de orfandad por feminicidio deben contar con educación, becas y un lugar digno en donde vivir y que tengan garantizado todo su desarrollo.

En su calidad de víctimas indirectas se busca brindar atención especializada a las niñas, niños y adolescentes que han perdido a sus madres a consecuencia de este delito, canalizándolas a otras instituciones para trabajar en la restitución de sus derechos.

Agregó que en algunos casos además de ser víctimas indirectas se convierten en testigos presenciales, es decir, niñas y niños que estuvieron en el momento en que sus madres fueron asesinadas.

Se trabaja bajo un protocolo emitido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación que prevé los casos en los que participarán en un proceso penal, por lo que se debe intervenir con atención psicológica urgente, trabajar contención y buscar redes de apoyo (familiares cercanos o personas de estricta confianza).

En algunos casos en donde las niñas y niños quedan solos, es necesario contactar con la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y Familia “trabajar para que de inmediato los podamos trasladar a un albergue, en este caso casas asistenciales”.

También se lleva a cabo un procedimiento de valor de riesgo, todos los fiscales tienen la obligación de solicitar medidas de protección inmediatas, siendo uno de los derechos de las víctimas.

El Estado debe generar una política pública que se mantenga en el tiempo para que las niñas y niños “no caigan en situaciones de más violencia porque quedan sin lo más importante que es su propia madre, en el seno de una familia destruida ante el asesinar ellos quedan en una vulnerabilidad mucho mayor y peor si se atraviesan contextos de pobreza o el abandono paterno y peor cuando el victimario es el propio padre”.

Actualmente se cometen 11 feminicidios cada día en el país y en Zacatecas son nueve mujeres asesinadas cada mes, destacó la presidenta de la Coordinación Feminista Olimpia de Gouges, María Luisa Sosa de la Torre.