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• 19 septiembre 2024

Por Edmundo Cázarez C. Foto Adrián Ponce Quienes lo conocen y han tenido la oportunidad de conversar con él, literalmente, quedan fascinados por su amabilidad, sencillez, educación, cultura y franqueza, pero, sobre todo, ese inigualable “don” de gentes que atrapa y conquista. Enrique Burak, es un destacado comentarista deportivo que, con esfuerzo y dedicación, se ha encargado de construir una muy brillante carrera en los medios de comunicación. A lo Mero Macho, su pasión por el deporte lo ha llevado a presenciar los eventos deportivos más importantes del mundo y su trabajo resulta sencillamente impecable y extraordinario. Tan es así, esas legendarias e inolvidables figuras del micrófono deportivo que ya se encuentran en el cielo, tales como Don Fernando Marcos, Pedro “El Mago” Septién y el toluqueño Ángel Fernández, se asoman para deleitarse verlo narrar. Lograr una entrevista exclusiva con él, no fue nada, pero nada sencillo. Una y otra vez, se mostraba reacio sentarse frente a una grabadora, argumentando no tener nada interesante que contar. Así es que, gracias a la valiosa intervención del buen amigo Manuel Feregrino, tuvieron que pasar dos largos años y siete meses para que, por fin, accediera, aunque fuera de “carrerita”, platicar con este reportero por espacio de 45 minutos, logrando descubrir a un hombre sumamente simpático, agradable y con una envidiable energía que transmite, sin embargo, él mismo… ¡No acepta haber llegado al sexto piso del edificio de la vida!!, y es que, la verdad, parece un “veinteañero” Sencillo y pulcro en el vestir, portando una camisa color beige con diminutos cuadros azules, un pantalón de mezclilla y tenis blancos, nos recibe en el interior de una muy reducida sala de juntas, ubicada en el tercer piso de la nueva sede de Grupo Fórmula, emisora en donde comparte micrófonos con destacadas personalidades como Ciro Gómez Leyva y Raúl Orvañanos, en donde, su ronco e inconfundible tono de voz rompe el silencio sepulcral que reina en el lugar. En esta primera parte de esta amena e interesante conversación que concedió a MSIÓN POLÍTICA, no obstante la enorme experiencia que posee, asegura que no puede darse el lujo de llamarse “periodista deportivo”, porque desde niño ha sido su pasión ser cronista, gracias a una pequeña grabadora que le había regalado su papá, es como podía producir sus propios programas deportivos, hasta su hermana lo auxiliaba como co-conductora, pero lo único malo, es que, ella, se ponía nerviosa ante la grabadora y no era lo suyo. -acota- Profundamente enamorado de todo lo que hace, con sobrada emoción, comparte algunos recuerdos de su etapa infantil, tal y como sucedió cuando jugaba a “las escondidas” con sus vecinos y amigos en un edificio de la colonia Narvarte, para que no lo encontraran, se le “ocurrió” salirse por uno de los enormes ventanales del cuarto piso y refugiarse en una muy reducida cornisa de tan solo veinte centímetros de ancho, con el peligro de caer. -A lo Mero Macho, es un agasajo poder conversar contigo… ¿Cómo te va en la vida? -Su ronco e inconfundible tono de voz, rompe por completo el silencio que reina en el interior de una pequeña sala de juntas, en el tercer piso del nuevo y moderno edificio sede de Grupo Fórmula, ubicado al poniente de la Ciudad de México. “Fíjate que me va muy bien, pero, antes de responderte, déjame decirte que te agradezco mucho que te hayas fijado en mi persona para este tipo de excelentes entrevistas que realizas con muy diversos personajes… Me preguntas ¿Cómo me va en la vida? Afortunadamente, me va muy bien tanto en lo personal como en lo profesional… -¿…Gracias a la vida? -¡Pues sí!!, espero que se mantenga así, en ambos casos…

-¿Quién demonios es Enrique Burak? La gente que tiene la oportunidad de conversar con él, queda fascinada por su educación, por su sencillez y humildad… Vamos, hasta Don Fernando Marcos, el “Mago” Septién y Ángel Fernández que están en el cielo, se asoman para deleitarse verlo narrar… -Totalmente sorprendido por lo que acaba de escuchar por parte de este reportero, su rostro enrojece visiblemente, se le hace un nudo en la garganta. Súbitamente, se levanta de la silla giratoria en donde está sentado y le brinda una leve palmada en la espalda a mi nieto Adrián y le dice: ¡Qué orgulloso debes sentirte tener un abuelo con la calidad humana que posee mi amigo Edmundo…!! ¡Vaya que me moviste el tapete con lo que acabas de expresar!! ¡Puff… vaya pregunta!! La verdad, es que me dejas totalmente desconcertado y sorprendido… -¡No le saques..!! -Un poco más tranquilo e inhalando profundamente, me expresa: “Es que no sé qué responderte… Mmm… ¡Ya sé!!, Enrique Burak es una persona que vive profundamente enamorado de todo lo que hace…” -Bueno, te la pongo más fácil… ¿Siendo niño, imaginaste que llegarías a ser un muy destacado comentarista deportivo? -Curiosamente, lo nombres de esas destacadas personalidades del micrófono que acabas de mencionar, quizás, tuve algún sueño poder estar con alguno de ellos en persona, y si no era con ellos, sí, era desempeñar esa misma atractiva actividad. -¿Eras afín al deporte? -¡Sí!!, siempre me gustó mucho el deporte, pero, sobre todo, me encantaban las voces de quienes lo narraban., -¿Eras un niño dechado de virtudes? -No, fíjate que no, practicaba mucho el boliche. También me gustaba el futbol soccer y hasta jugué beisbol dentro de la Liga Olmeca, pero… -¿Practicabas el deporte, pero al mismo tiempo, te morías de ganas por transmitirlo de manera simultánea…? -¡…Sí!!, siempre fiel a los valores que me enseñaron en casa… -¿Esto lo dices por tu robusta corpulencia y no llegar a lastimar a los demás? -¡Exacto!!, no se trataba de pasar por encima de nadie, aprovechando que la vida había sido un tanto generosa conmigo. -¿Cómo fue esa niñez en tu natal San Luis Potosí? -Quiero decirte que, por cosas extrañas de la vida, nací en San Luis Potosí, pero a los tres meses de vida, me trajeron para la Ciudad de México. -¿Por qué? -Es que mi papá se desempeñaba como agente de ventas de Grupo Vitro, teniendo como base San Luis Potosí, era el encargado de atender todo el bajío del país… -¿Ahora sí, que, camino se hace al andar? -Digamos que sí, justo a los tres meses en que había nacido, lo transfieren a la Ciudad de México. Así es que soy más capitalino que potosino… ¡Orgullosamente, soy más de la Ciudad de México!! -¿Qué número te tocó ocupar en el seno familiar…? -Yo soy, bueno, debo aclarar que mi papá se casó en dos ocasiones, de esta manera, soy el primer hijo de las segundas nupcias de mi papá. Del primer matrimonio, tengo a mi hermano Moisés, que es cuatro años más grande que yo. Ya en su segundo matrimonio con mi mamá, fuimos mi hermana Dina y yo, a quien le llevo tres años. -¿Pero cómo viviste esa infancia en aquella Ciudad de México? -Fíjate que fue mucho muy feliz, la verdad… -¿En dónde vivías? -En la colonia Narvarte, en la calle de Luz Saviñón 1464, departamento número cinco. Posteriormente, cuando estaba por cumplir doce años, nos mudamos a la calle de Concepción Beistegui, precisamente, el mismo día en que se llevaban a cabo las elecciones presidenciales de 1976, en donde resultó electo José López Portillo, nunca entendí porque habían escogido ese día, en especial, para llevar a cabo la mudanza. -¿Hasta cuándo permaneciste viviendo en Concepción Beistegui…? -Ja, ja, ja… ¡hasta que me casé...!! -Mejor cuéntame como te fue durante la primaria… -La primaria la cursé en el Colegio Israelita de México, de hecho, ahí estuve desde… -¿…El kínder? -No, fíjate que no. El kínder lo hice a una cuadra de mi casa, en el kínder Blanca Margarita, que, por cierto, ya no existe. -¿Me decías que toda tu educación básica y hasta prepa, la cursaste en el Colegio Israelita? -¡En efecto!!.

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.. -¿Eras un niño aplicado, del montón o “medio burrito”, claro, sin faltarte el respeto… -Ja, ja, ja… ¡no te preocupes!! Digamos que era un buen estudiante, así, a secas… -¿A lo mero macho? -Sí, a lo Mero Macho. No era un chico de puro diez… -¿Cuál fue tu año “coco” durante la primaria? -¡Uy, mi querido Edmundo!!, te pones a escarbar y me tienes totalmente motivado con mi pasado… Respondiendo a tu pregunta, creo que, para mí, fue mucho muy pareja la primaria. Lo que sí te puedo decir, es que ciertos maestros me marcaron, como fue la maestra Luisa Polo, en segundo año… -¿Por qué? ¿Acaso era como la maestra “Canuta”? -Ja, ja, ja, la verdad es que sí, era demasiado “dura”, pero por algún motivo -no sé cuál-, pero yo le caía bien. -¿El “niño consentido” del salón? -¡No lo sé!!, pero la llevaba bien con la maestra, su trato hacia mi persona siempre fue mucho muy amable… -¿Y luego? -Estando en quinto de primaria, tenía un maestro que se llamaba Rosendo Hidalgo, que era muy buena onda conmigo. Así como mi maestra Eugenia de sexto. -¿Un tanto “matadito”? -¡No!!, aunque a decir verdad, “matadito” me hice estando ya en prepa… -Pero estamos en la etapa de primaria… ¡espérame tantito!! ¿Quién te ayudaba con tus tareas? -¡Nadie!!, la verdad, es que en ese aspecto de cumplir con mis tareas, fui mucho muy cuidadoso, dedicado y bastante responsable -Frotándose las manos me dice- ¡Uff Edmundo!!, me hiciste dar un vuelco a mi memoria, me ayudaste a comprobar que no tengo malos recuerdos de mi etapa de niño de primaria. -¿De los cinco días que asistías a la escuela, cuál te gustaba más? -¡Indudablemente que el viernes…!! -¿Por qué? -Porque sabía que el mismo viernes por la tarde, todo el sábado y domingo los tenía para jugar. Por cierto, no recuerdo bien si fue durante la primaria o secundaria, pero gozaba de una beca… -¿Tu familia era muy pobre? -No, pobres, pobres que digamos no, pero tampoco nos sobraba el dinero… -¿Una familia de clase media? -¡Ándale!!, de clase media, media. Porque luego sacan que hay media alta o media baja, pero muy baja. Mi familia éramos de la clase media, media… ¡media!! -¿Con esa beca, estabas obligado a “pulirte” como estudiante? -Digamos que era de ocho para arriba. Era un chico cumplidor. -¿También eras travieso? -Antes de responder, con los dedos de su mano derecha, se aplica un suave masaje por su amplia frente, como ayudando a fluir los recuerdos. Me observa detenidamente y exclama: “Más que travesuras, eran estupideces que comete un adolescente… -No te azotes, mi querido Enrique… ¡Nadie es perfecto!! -Ja, ja, ja…. -¿…Me vas a decir qué travesuras hacías o no? -Me acuerdo que, cuando ya nos habíamos cambiado a la calle de Concepción Beistegui, acababa de terminar la primaria, a punto de ingresar a la secundaria, un amigo de nombre Juan Manuel, nos invitó a jugar a “las escondidas”. Como mi casa estaba en el cuarto piso había un ventanal… ¡enooorme!!, total, como no encontraba en donde esconderme, se me ocurrió salirme por ese ventanal, quedando parado en una muy reducida cornisa de veinte centímetros de ancho… Ahí me tenías, permaneciendo, según yo, oculto en el mejor de los escondites porque nunca me encontraron… -¡No inventes!!, te resbalabas, y ahí, se acababa la historia de Enrique Burak… -¡Exacto!!, son de esas cosas estúpidas que haces y hasta luego reflexionas… ¡No puede ser!! En una de esas, el idiota de Enrique Burak se resbala… ¡y se mata!! Afortunadamente no sucedió nada. -¿Cuántas veces te castigaron por tus travesuras? ¿Fuiste blanco del “chanclazo” de tu mamá o el rigor del cinturón de tu papá? -¡Que bonita entrevista, que me lleves de la mano a recuperar todas esas imágenes tan tuyas…!! Ahora que lo dices, resultaba algo muy curioso porque mi mamá, por algún motivo, su piel y sus venas eran sumamente delgaditas, de esa manera, si nos quería dar nalgadas o una cachetada marca diablo, el daño era para ella y no para nosotros… -¿Quién resultaba lastimada era tu mamá?

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-¡Exacto!!, se le hacían enormes moretones en las manos, entonces, no nos podía “nalguear…” -¿…Bendita salvación? -Pero de mi papá no nos escapábamos, me acuerdo que en alguna ocasión, el cinturón se hizo presente. Al tener orígenes judíos, al cinturón le llamábamos “pasik” Y sí eh, recibí varios cinturonazos de su parte, pero muy pocas veces. -¿Por qué te castigó? -No me acuerdo con exactitud por qué… -Ya me habías dicho que eras un buen niño… -Más que un buen niño, la verdad, era un niño sumamente aburrido que se la pasaba viendo la tele… -¿Qué programas veías? -Ahorita te digo, nada más déjame contarte que, en una ocasión, mandaron llamar a mi mamá de la escuela para preguntarle qué tipo de actividades realizaba yo en casa, y mi mamá, sin más ni más, les dijo que me la pasaba viendo la tele. Ahora sí, me encantaban ver programas tales como “Perdidos en el Espacio”, “El Túnel del Tiempo”, “Tierra de Gigantes”, “Hechizada”, “Mi Bella Genio”, “Don Gato y su Pandilla”, “Los Picapiedra”, en fin -¿Cuál era tu juguete favorito? -Me acuerdo que tenia un perrito de peluche y lo bauticé con el nombre de “Tanny”, pero me platicaba mi mamá, que tenia la costumbre de chuparme el dedo, y al mismo tiempo, acariciaba el perrito con los otros deditos, ya te imaginarás, al poco tiempo, el “Tanny” se iba quedando pelón. Así es que, como por arte de magia, apareció otro “Tanny” -¿Eras un niño colmado de niños o acostumbrado al… ¡cállate!!? -Creo que era un trato normal… -¿Acostumbrado a que la educación con sangre entra? -No!!, no y no. Éramos unos niños sumamente tranquilos. Nuestro estilo de vida era ir de la escuela a la casa y viceversa. -¿Cómo te divertías en tus tiempos libres? -Me encantaba ir al boliche con mi papá, quien era un gran jugador y presidente de la Liga de Boliche Chapultepec, todos los sábados se organizaban torneos en el entonces famoso Bol Polanco, y los lunes, participaba en torneos de la Liga Bahía y del Centro Deportivo Israelita. Me encantaba ir con él, sobre todo, cuando estaba de vacaciones en la escuela. -¿Cuántas “chuzas” te aventabas en el boliche? -No me acuerdo, pero creo que, poco a poco, fui mejorando con el paso del tiempo y llegué a contabilizar un promedio entre 180 y 195 “chuzas”, que era más o menos el ritmo de juego y récord, que me había impuesto yo mismo. Justamente cuando ingreso a Televisa, se acaban mis participaciones dentro de los torneos de boliche y el tiempo libre con el que contaba. Asimismo, déjame decirte que, durante un par de años, también practiqué el beisbol. -¿Qué premios recibías en casa cuando lograbas tanto en la escuela o en el deporte? -Sin caer en lo jactancioso, creo que fui un buen estudiante, sin dar ningún tipo de problemas, por lo tanto, no recibía ningún tipo de premios o estímulos, mucho menos, castigos por parte de mis padres. Era lo único que tenia que hacer, cumplía con mi obligación de ser un buene estudiante. -¿Un niño tranquilo y de lo más normal? -Absolutamente… -¿Quiénes eran tu verdaderos amigos y cómplices, en el edificio en donde vivías? -Tenia un par de amigos en el edificio de Luz Saviñón, por cierto, mi nombre es Enrique, pero ellos me decían “Hershell” porque también se llamaban igual que yo, Enrique, así es que, simplemente, nos decíamos “amigo”, para evitar las confusiones. Otro de esos amigos se llamaba Jorge, con quien jugué beisbol dentro de la Liga Olmeca. -¿El viejo edificio de Luz Saviñón, era algo así campo de juego? -¡Exacto!! Recuerdo que, desde la entrada, era un enorme pasillo conducía hasta el garaje y a los costados, tenía enormes ventanales. Un día, jugando una “cascarita” de futbol… No recuerdo exactamente si él me empujó o yo a él, total, cae sobre uno de los enormes ventanales y se rompe de manera estrepitosa, se escuchó horrible como los vidrios salían volando por todos lados… -¿Salieron lastimados? -¡No!!, afortunadamente, no nos pasó absolutamente nada, pero fue la última vez que nos dejaron jugar ahí… -¿…Y qué sucedió?

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-Jugaba con mi hermana dentro del departamento o nos salíamos a la calle en patines y le dábamos la vuelta a la manzana. Inclusive, ahí mismo, en casa, nos las idéabamos para jugar boliche en el departamento… -Ya estabas en tu etapa de pre adolescencia… ¿Qué querías ser de grande? -Al principio, me llamaba mucho la atención todo lo que tenía que ver con la arquitectura… -¿…Por qué? -¡No lo sé!!, pero, para dibujar, siempre he sido malísimo, sin embargo, me gustaba mucho diseñar planos y elaborar maquetas… -¿Creativo? -¡No, para nada!!, por cierto, me acuerdo mucho de un enorme librero que tenía mi tío Honoberto Fernando Von Rossum, hermano de mi mamá y me puse a dibujarlo… -¿No que no sabias dibujar? -No era precisamente un dibujo como tal, sino un diseño de ese librero con algunas innovaciones mías… -¿Y cómo te quedó? -Ja, ja, ja, creo que más o menos bien. Asimismo, tenia un juego muy parecido al famoso “Lego”, pero que se llamaba “Idema”, con el que diseñaba cochecitos, casitas… -¿Ya traías el “gusanito” de la tele? -¡Fíjate que si!!, también empecé a diseñar y crear, a escala, mis propios estudios de televisión con lujo de detalles… -A lo Mero Macho, ¿querías ser como Don Fernando Marcos, Pedro “El Mago” Septién o Ángel Fernández? -¡Uff!!... ¿Qué te digo?, creo que sí, pero también no… -A ver, explícamelo más despacito… -Como te platicaba al principio, mi papá trabajaba dentro de Grupo Vitro y contaba con un Palco dentro del Estadio Azteca para llevar clientes… -Era una oportunidad de oro para ti… -¡Exacto!!, cuando el Palco no tenía compromisos que cubrir, totalmente libre, nos llevaba a ver partidos de futbol… -¿Qué sentías llegar al Estadio Azteca y admirarlo desde el interior de un Palco? -Era muchísima la emoción que me invadía, la verdad, para mí, era indescriptible poder estar ahí porque, además, a los Palcos del Estadio Azteca, forzosamente, tenías que llegar en coche hasta la puerta del Palco y la ventana estaba casi de mi estatura… Apreciar la intensidad de color verde del pasto, para mí, era maravilloso, escuchar el rugir del público en las tribunas, eso… ¡Claro que me capturó!! -¿Y qué me dices de las voces magistrales del “Mago” Septién, Don Fernando Marcos o de Ángel Fernández? -Pues me “cimbraste” completamente con tu primera pregunta, al decirme que esos enormes y gigantescos personajes que están en el cielo se asoman para verme narrar los partidos…. A lo Mero Macho, se me hizo un nudo en la garganta… -Te voy a cobrar derechos de autor por lo de... A lo Mero Macho… ehh… -¡No importa!!, pero me hiciste sentir algo que jamás me habían dicho. Escuchar las voces de esos gigantes del micrófono como lo fueron Jorge Sony Alarcón, “El Mago” Septién, Fernando Buenrostro y de Ángel Fernández, era simple y sencillamente fabuloso. -¿Querías ser como ellos? -Me acuerdo que, en aquella época, existía un juego de mesa que se llamaba “Chutagol” que se jugaba entre dos personas, pero como nada más era yo en mi casa, lo jugaba solo, es decir, un equipo era la mano izquierda, y el otro, la mano derecha, me ponía a narrar el partido con el estilo muy propio del inolvidable Ángel Fernández… -¿Tuviste la oportunidad de conocerlo en persona? -¡Si!!, para mí, ha sido el mejor de todos los comentaristas deportivos que haya tenido el México moderno… -¿Ese fue el detonante para que te dedicaras a esta apasionante actividad de comentarista deportivo? -¡Sin lugar a dudas!! Creo que fue por ahí que empezó a surgir todo esto. Me acuerdo que tenía como 11 o 12 años, cuando mi papá me regaló una grabadora portátil… -¿Todo te salía a pedir de boca? -¡Exacto!!, me ponía hacer mis narraciones deportivas… -¿De alguna manera, también te influyó el icónico programa de televisión “DeporTV”, que conducía José Ramón Fernández?

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-Sin lugar a dudas, sobre todo en época de vacaciones, también veía el programa Acción de Televisa y anotaba resultados para que el lunes siguiente me ponía a escribir mis guiones y hasta le pedía a mi hermana que me ayudara cono co-conductora, pero se ponía muy nerviosa, y pues a decir la verdad, no era lo suyo… -¿…Neta? -¡Sí!! Hacia mi programa tal cual, hasta lo musicalizaba. Tan era así, que grababa la entrada de esos programas. Así fue como comencé hacer mis “pininos” desde mi casa. -Con el respeto que me mereces y la admiración que te tengo… ¿A lo Mero Macho, aspirabas llegar a ser una simple copia de ellos? -¡Ora!!, no te preocupes, entiendo tu pregunta. No era tanto ser como ellos, sino que era algo que verdaderamente me apasionaba. -¿Cómo fue el paso por la secundaria? -De lo más normal, porque éramos los mismos alumnos. De hecho, ya ves que resulta un tanto típico que te revuelvan entre toda la comunidad estudiantil, pero con nosotros no sucedió tal cosa, éramos los mismos de la primaria. El único cambio que detecté estando en la secundaria, que de cierta forma es benéfico, para que te “abras más” y conozcas más gente… -¿…Cuál fue esa diferencia para ti? -Que de pronto, estaba acostumbrado a que tenia solamente uno o dos maestros en toda la primaria, y de pronto, me ponen enfrente del salón a poco más de ocho o nueve maestros y uno para cada materia… -Nadie es perfecto…. -¡En efecto!!, a unos, les caía bien., pero a otros, no, la verdad era que no. -¿Cuál fue esa materia “coco” para ti? -¡Uff!!, mi querido Edmundo, me siento estar frente al sicólogo, me pones a escarbar en mi vida privada… ¿Mi materia “coco”?... Creo que fue Física. Curiosamente, matemáticas me gustaba mucho por los logaritmos, seno, coseno tangente y todo eso… -¿Te costaba trabajo dejar la etapa infantil? -¡Eso es!!, como que de pronto, salía disparado hacia una nueva etapa de mi vida… -¿Todo una odisea brincar del cascarón, empezar a investigar tu hábitat? -Algo así, como que todo se acoplaba y hasta los nuevos maestros se prestaban a que les pusiéramos apodos, como sucedió con el maestro de Biología que le decíamos “El Erizo” o al de Geografía que le decíamos “El Chespi” o al maestro de Química de apellido Hierro, a quien le decíamos “el pirata” porque estaba mal de un ojo y utilizaba un parche, pero cuando alguien no se callaba en el salón, tenía una formidable puntería, les lanzaba gises de manera brutal… ¡era bárbaro!! -¿Cuántas materias reprobaste? -No, la verdad es que no, sí te puedo decir que saque más de un seis o un siete. La verdad, es que nunca les di problemas a mis padres en ese aspecto. Mis calificaciones rondaban entre ocho, nueve y uno que otro diez -¿Cuántas veces te fuiste de “pinta”? -Vaya, si me hubieras dicho de qué se trataba la entrevista…. ¡No vengo!!, ja, ja, ja. ¡No es verdad!! Me tienes totalmente sorprendido porque pensé que sería únicamente acerca de los recientes Juegos Olímpicos o la Liga Mx… ¡Vaya sorpresa!!, me hiciste dar un vuelco a mi niñez y traer gratos recuerdos… -No le saques, dime cuántas veces te fuiste de “pinta” en la “secun..”. -Fíjate que en la secundaria no, pero estando ya en la prepa, sí -Antes que entremos a tu etapa de prepa… ¿Cuál era la niña que te traía derrapando el pavimento? -Es que no me acuerdo…. -¿No te acuerdas o no te quieres acordar…? -Ja, ja, ja… Es que, comparado con los chavos de ahora, creo que era un tanto hasta retrasado mental o muy baboso en ese aspecto. Es decir, nuestro despertar sexual era mucho más tardado y nos distraíamos más practicando deporte… -¿Cuál era ese deporte que te apasionaba practicar? -Todo dependía de la época del año, es decir, si había una serie mundial de beisbol, pues jugábamos beisbol. Si comenzaba la liga mexicana de Futbol, pues a meter goles. Si comenzaba la liga de futbol americano, pues a jugar un “tochito” con los cuates… -¿Y si había un campeonato de box? -¡No!!, siempre he sido muy pacífico… ja, ja, ja. -¿A qué equipo de futbol le ibas? -Al América y te digo que le “iba”, porque ya no.

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Además, fue algo muy curioso porque la final del futbol mexicano en 1972 del América fue contra Cruz Azul y pierde el América… -¿Por qué no le ibas a Cruza Azul? -¡No sé!!, pero mi gran amigo de la infancia y adolescencia, que luego se cambió de aquí y nos dejamos de ver muchos años, bueno, pues él, sí le iba a Cruz Azul y cuando iba a visitarlo a su nueva casa, nos echábamos una “cascarita” en su jardín… ¡y siempre me ganaba!! 

Por cosas de la vida, Enrique Burak, prestigiado y extraordinario comentarista deportivo, nace un 2 de agosto de 1964 en San Luis Potosí, pero a los tres meses de su llegada al mundo, su familia se ve en la imperiosa necesidad de mudarse a la Ciudad de México, debido a cuestiones laborales de su papá, quien trabajaba para Grupo Vitro. Desde muy pequeño, mostró su pasión por los deportes. Gracias a la cercana amistad que existía entre Fernando Schwartz y la familia de mi entrevistado, logró establecer el “click” que le permitió vincularse con el área de deportes del entonces Canal 8 de Televisa, que posteriormente cambio a Canal 9, ante el surgimiento de XHIMT Canal 7 de Imevisión, para evitar interferencias en las señales de ambos canales. Fernando Schwartz, quien tenía a su cargo la sección de deportes de 24 HORAS con Jacobo Zabludovsky, decide llevarlo a Televicentro para que conociera y comenzara a familiarizarse con todo el engranaje de la Dirección de Noticieros y Eventos Especiales de Televisa y comenta: “Los tiempos de Dios son perfectos, resulta que hablan de la dirección general de Canal 8 para la creación de un programa que se llamaba Reporte Juvenil, que se transmitía los sábados por la mañana, con la conducían de Octavio Fernández de Teresa y Leticia Gurayeb, en donde necesitaban a un chavito que apenas estuviera empezando… ¡y yo daba ese perfil!!” De esta manera, fue como le asignan la sección “Deporte juvenil”, enfocada al deporte amateur, no obstante que, él, se había convertido en un asiduo seguidor del deporte profesional. Sin lugar a dudas, era una prueba de fuego, la información deportiva amateur siempre ha sido a cuenta gotas ni se contaba con fuentes. No le quedaba de otra que batallar. Con entrega y dedicación, pudo realizar un muy buen trabajo y empezar, con el pie derecho, su brillante carrera dentro de la televisión en 1982. Con una impresionante trayectoria de más de 40 años, Enrique Burak ha tenido la fantástica oportunidad de participar en infinidad de programas y noticieros de radio y televisión, destacando la cobertura de 30 Super Bowls, 27 Series Mundiales de Beisbol, 9 Series Finales de la NBA, 8 Juegos Olímpicos de Verano, 4 Juegos Olímpicos de Invierno, 3 Juegos Panamericanos, 4 Mundiales de Atletismo, 1 Mundial de Gimnasia, y por si fuera poco, 17 Temporadas de la Liga Mexicana de Beisbol, Temporadas Regulares de la NFL, incluyendo Juegos del Salón de la Fama. Desde 1984 a la fecha, todas las Series de Campeonato de las Ligas Americana y Nacional de Futbol Americano. Así como Copas Mundiales de Clavados y Copas Davis de Tenis. Su inagotable actividad periodística parece no tener límites, desde los 18 años de edad, ha tenido a su cargo la conducción de las secciones deportivas de diversos noticieros de televisión, tales como “6 En Punto” con Alfonso Teja, “ECO” con Jorge Berry, “24 HORAS” con Abraham Zabludovsky, “El Noticiero” con Lolita Ayala, entre otras muchas más. En lo referente a su incursión dentro de la radio, su inicio fue a través de la señal de Grupo Rasa, con la exitosa conducción del programa “Por la Senda del Deporte”, con una permanencia al aire desde 1990 hasta 2000. En 1997, ingresa a Grupo Fórmula participando en diversos proyectos. Actualmente, sus gustadas secciones en “Ciro por la Mañana”, con Ciro Gómez Leyva, y “La Fórmula Es…”, con Raúl Orvañanos, son de las más escuchadas por miles de seguidores en México y todo el mundo, vía internet En esta segunda parte de la amena e interesante conversión que concedió a MISIÓN POLÍTICA, sostiene: “Para ser un verdadero cronista deportivo, se requiere una auténtica pasión por el trabajo que se realiza.

Durante los últimos 40 años, me ha tocado ver un desfile de “periodistas deportivos”, tanto en la tele como en los medios de comunicación, que no tienen el mínimo respeto hacia el televidente o el radioescucha, llegan al palco de transmisiones preguntando ¿Qué equipo es este?, denotando una total falta de conocimiento y preparación” -Nos quedamos en tu paso por la prepa… ¿A dónde te ibas de “pinta”? -Fíjate que no recuerdo haberme ido de “pinta”, lo que sí tengo presente, como esas cosas emocionantes, era cuando pasaba el camión de la escuela y como vivíamos en la calle de Concepción Beistegui, mi escuela estaba ubicada en la calle de San Lorenzo número 290, que ahora, es la Universidad de la Ciudad de México, nos íbamos caminando a la escuela, mi hermana, mi vecino Isaac y yo, veíamos pasar el camión de la escuela con todos mis compañeros y nos saludábamos como si se fueran de viaje… ja, ja, ja. -¿Naciste en pañales de seda, lo que ahora llaman ser niño fifí? -No mi estimado Edmundo… ¡No nací en pañales de seda!!, la verdad, es que mi papá no ganaba mucho dinero… -¿Durante el periodo de vacaciones te llevaban de viaje? -¡Uff!!... ¿durante las vacaciones, haber viajado? ¡Híjole!!, lo único que viene a mi memoria, es habernos ido de viaje a Acapulco varias veces, en uno de esos viajes, por cierto, no fue mi papá con nosotros. -¿Y al extranjero? -Cuando tenía 8 años, hicimos un viaje a España. Resulta que la tía de mi mamá, ya era una señora grande, fuimos a visitarla… ¡Ese fue el viaje más “guau” que te puedes imaginar -¿Qué sentiste cruzar el “charcote” siendo un niño? -La verdad, era algo completamente nuevo para mí, subirme a un avión, hasta me resultaba muy padre. Además, era la primera vez que salía de mi país, porque los viajes Acapulco eran en coche. Posteriormente, hicimos un viaje a California, Estados Unidos y que jamás se me va olvidar, fue uno que mi mamá adquirió mediante una agencia de viajes, visitando 75 ciudades en tres días -tronándose los dedos exclama- “andábamos de arriba para abajo en un autobús…” -En ese preciso momento, se escuchan truenos del tremendo aguacero que estaba cayendo al poniente de la Ciudad de México en donde está ubicado Grupo Fórmula y me dice-: “¡Se va a caer el cielo!! Retomando tu pregunta, ahorita que me acuerdo, también pasaba muchas vacaciones en Toluca, porque ahí vivía la hermana de mi mamá…” -¿En esa Toluca tranquila y pacífica, te daban ganas de andar en bicicleta y patineta? -Ya que lo mencionas, ahí fue en donde aprendí andar en bici y cosas por el estilo… ¿Pero haber nacido en pañales de seda?... ¡No, para nada!! Me acuerdo que siempre vivíamos en casas rentadas, tanto en Luz Saviñón como en Concepción Beistegui, hasta que los dueños de ese edificio optaron por vender y quien quisiera comprar… -¿Y qué sucedió? -Si no me falla la memoria, creo que toda la familia, le echaron la mano a mi papá para que comprara ese departamento… -¿Cómo era el adolescente Enrique Burak y cómo fue su comportamiento? -Creo que mi adolescencia y pubertad, fue una combinación entre secundaria y prepa. Ya salía un poquito más a la calle en compañía de mis amigos más cercanos de esa época, Carlos y Nathan, nos reuníamos los viernes o sábados. -¿El primer cigarrito o la primera chela? -Ja, ja, ja, me gusta cómo rompes la monotonía. ¿La primera chela?... Mmm… creo que fue cuando… -Ese tipo de escuelas de judíos, son mucho muy estrictos verdad… -¡En efecto!! Cuando termino la secundaria e ingreso a prepa, se estilaba realizar un viaje de convivencia durante seis semanas que, en realidad, era como más de turismo… -¿A dónde era ese viaje? -A Israel, haciendo base en un determinado lugar. Así es que fuimos a Tel Aviv, Jerusalén y otros lugares más. Y en una de esas noches de fiesta… ¡había cervezas!!... -¿Qué edad tenías…? -Acababa de cumplir 16 años. Total, me tomé lo que eran mis primeras chelas… -¿Te pusiste todo “happy”? -Digamos que solamente me sentí un poco mareado… -¿Sin llegar a la “peda”? -No, la verdad es que no.

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Ahora que lo mencionas, borracheras brutales de las que tenga memoria, quizás una, creo que fue cuando terminé la prepa. Se organizó una reunión, ahí sí, para que veas, me puse “borrachísimo”, cuando ingerí varias “cubas”, me sentí totalmente mareado para terminar vomitando y vomitando… ¡fue horrible, fue horrible!! -¿Y hoy en día, siendo ya un adulto mayor? -Pues fíjate que no. Hasta la fecha, las “cubas” me dan asco, además, la cerveza no me gusta. -Bueno, mejor cuéntame cómo fue tu paso por la prepa… -Completamente más dedicado… -¿Ya tenías definida tu vocación hacia el futuro? -Sí, estando en tercero de prepa, ya sabía que me quería dedicar a esto de los medios de comunicación… -¿Por qué? -Ahí, ya fue mucho más fuerte el asunto que me quería dedicar a la comunicación porque me encantaba el deporte -A lo Mero Macho ¿Cuál fue el detonante para que te dedicaras a la comunicación, porque veías a Joserra en Imevisión -Hoy TVAzteca-? -A José Ramón Fernández, lo seguía mucho en su programa “DeporTV” de Imevisión, así como a Raúl Orvañanos, pero siempre, jalé mucho más en mis afectos personales, es decir, siguiendo las transmisiones deportivas de Televisa. -¿Por qué? -¡No lo sé!!, creo que fue algo que se dio en mí, poco a poco. Quizás, porque, como te contaba, hacia mis propios programas con mi pequeña grabadora y utilizaba el tema del programa “Acción” de Televisa. -¿Te costó mucho trabajo elegir, como deshojar la margarita? -¡Qué pregunta tan interesante!!, te repito, creo que fue algo que se dio poco a poco y hasta el punto en que tenía que elegir… -¿…Y? -Pues me decidí por el Área 3, en la que estaba clasificada comunicación. Pero también, hubo un momento… -¿Dudaste entrar a la universidad….? -¡Vaya!!, me sorprendes. No es que no quisiera entrar a la universidad, sino que me invadía la duda de estudiar otra cosa que fuera como de respaldo… -¿…Cómo qué? -¡Contaduría!!... -¿Dudabas de ti mismo? -Era algo natural, ponerme analizar y sin tener la seguridad de poder conseguir o no, una chamba dentro de la comunicación-¿Quién te dio “chance” de probar suerte en los medios? -Fíjate que conocía a Fernando Schwartz, era amigo de la familia y compañero de generación de una prima, coincidiendo en eventos familiares a los que acudía Fernando. -¿Qué edad tenías tú? -¡14 años!!. Me acuerdo que estaba en desarrollo el Mundial de Futbol Argentina 78 y Jorge Berry era el titular de la sección deportiva del noticiero 24 HORAS de Jacobo Zabludovsky, pero Jorge Berry estaba en Argentina cubriendo para 24 HORAS todo lo del mundial, por lo tanto, Fernando Schwartz estaba haciendo la sección deportiva con Jacobo. -¿Qué impresión tenías de él? -Me tenía muy sorprendido porque estaba mucho muy chavito, creo que tenía entre 17 y 18 años de edad. En una de esas reuniones familiares, aprovechando que Fernando Schwartz estaba ahí, toda mi familia sabia perfectamente que me gustaba todo eso… ¡y que me sientan junto a Fernando…!! -¿Qué sentiste estar junto a él porque lo veías en la tele? -La verdad, literalmente, me temblaban hasta las rodillas de la emoción -¿Te hiciste “pipí”? -¡No!!, sino que me arme de valor, le dije que me gustaba todo lo que tenia que ver con el deporte y la comunicación-¿Y qué te dijo? -Que estaba mucho muy chavito, que le echara un telefonazo más adelante… -¡Vaya historia!! ¿Pensaste que Schwartz te había dado “el avión”? -¡Espérame tantito!!, resulta que estando en el lapso de segundo para entrar a tercero de prepa, le hablé a Fernando Schwartz y me dice que sí… ¡Wooow!!, sin pensarlo ni un minuto más, comienzo ir a Televisa. -¿Cuéntame cómo fue ese primer día que fuiste a Televisa y qué diablos pasaba por tu mente al ver todo el engranaje de noticieros que encabezaba Jacobo Zabludovsky? -Por principio de cuentas, no me dejaban entrar… -¿Por qué? -¡Porque estaba muy chico de edad, además, en recepción de Niños Héroes 27, había una señora mucho muy dura, finalmente, me dejaron entrar cuando Fernando fue por mí. -¿Cómo fue ese trato con Schwartz cuando ya estabas en su oficina?

11:18 AM

-Un trato mucho muy amable, atento y respetuoso conmigo. Convenimos que iría por las tardes, saliendo de la prepa. -¿Qué te ponían hacer? -Todo era aprendizaje para mí. Me enseñaron a redactar. Era aquella época en que te pasaban los famosos cables que llegaban a través de télex de las agencias de noticias y te llenabas las manos de papel carbón. -¿Ya sabías escribir en máquina? -¡No!!, tuve que aprender a escribir “de dedito”, en aquellas enormes máquinas mecánicas Olivetti, redactar en los también famosos “ditos”. Le pasaba a Fernando lo que había escrito para que me corrigiera… -¿Cuál era su actitud? -Fue sumamente paciente conmigo. Me decía que le cambiara esto y aquello, esto súbelo y esto bájalo… en fin. -¿Salías con los reporteros para aprender cómo hacían sus notas? -¡Por supuesto!!, me permitían ir con los reporteros cuando había “chance” -¿Recuerdas con quiénes fuiste? -Con Arturo Rivera, Noel Cárdenas, Nuria Basurto, Addiel Bolio y Toño de Valdés, grandes reporteros de aquella época que integraban la redacción de deportes, que era… -Extendiendo los brazos, con sus manos, define el tamaño que tenía la redacción de deportes de Televisa en aquella época en que comenzó su aprendizaje- “Era un poco más chiquita que esta reducida sala de juntas en la que estamos ahorita. Me acuerdo perfectamente que nada más había tres escritorios, uno era para Fernando, otro lo ocupaba Aidé, quien era la secretaria, y el último, lo utilizaba Gerardo Peña…” -A lo Mero Macho, ¿qué sentías estar ahí? -Era algo totalmente increíble. De pronto, era poder ir al Teatro Estudio “A” Paco Malgesto, que se cayó en el temblor del 85, en donde se grababan aquellos programas como “Mi Secretaria”, “La Carabina de Ambrosio”, “El Gran Premio de los $64,000”, “Siempre en Domingo” con Raúl Velasco, como no tenía mucho que hacer, me daba mis vueltas para presenciar como grababan los programas, aunque otros, eran “en vivo” Era una delicia para mí, como si estuviera en un cine, pero todo “en vivo” -¿Creías estar soñando pero testigo presencial de lo que se transmitía en la tele? -¡Ándale!! También iba a unos estudios muy chiquitos, los KLM, en donde se hacían algunos noticieros y las cápsulas de los cortes informativos. -¿Pero cómo te involucras y logras que te dieran chance de probar tu voz y narrar? -Eso, sucedió un domingo. En uno de los pasillos de Televisa me encontré con Fernando Von Rossum, quien, para mí, era uno de los mejores cronistas del futbol americano que tenía Televisa, vamos, la NFL en persona. En eso, Fernando me dice… ¡Hey... qué tal joven!!... -¿Ahora sí, como dice el dicho… “Sentías que la Virgen te hablaba…? -No podía dar crédito que me estuviera hablando a mí… -¿Qué pensaste? -Me quedé helado y sin saber qué decirle… -¿Pero cuál fue tu rección? -Por dentro me dije… ¡En la madre!!, lo primero que se me ocurrió fue decirle que estaba ahí tratando de aprender. La respuesta de Fernando fue de inmediato y me dijo: “Pues aquí, vas aprender porque si vas a tratar, mejor vete para tu casa…” -¡Sopas!!, más claro ni el agua… -A partir de ahí, mi transitar por los pasillos de Televisa Chapultepec se incrementaron notablemente, era conocer más gente. Así es que, terminando tercero de prepa, en el Centro Israelita de México, se organizaba un viaje de fin de prepa…. ¡todo un año a Israel…!! -¿Y qué hiciste? -Me dije, Enrique, ya estás aquí, además, había empezado con el pie derecho en Televisa y deseché ir al viaje a Israel. -¿Cuál fue la primera nota que te encomendaron como reportero de deportes? -Déjame terminar la idea de tu pregunta anterior, no iba a dejar ir una valiosa oportunidad por un viaje de placer con mis compañeros de prepa. Era mi futuro y lo que me apasionaba. A partir de ese momento, estuve seis meses aprendiendo en Televisa hasta que entré a la universidad. -¿Te pagaban?

11:18 AM

-¡No!!, porque estaba en calidad de “aprendiz” Pero dime: ¿Quién demonios te da esa valiosa y única oportunidad? Por cierto, todavía era Canal 8, porque luego cambió a Canal 9, para evitar interferencias en las señales, ante el surgimiento de XHIMT Canal 7 de Imevisión. -¿Te dijiste… de aquí soy? -¡Definitivamente!! Fernando Schwartz fue quien me arropó… -Los tiempos de Dios son perfectos… Tienes mucha razón en eso, todo coincidía a la perfección. Hablan de la dirección general de Canal 8 para la creación de un programa que se llamó Reporte Juvenil, que se transmitía los sábados por la mañana, lo conducían Octavio Fernández de Teresa y Leticia Gurayeb, pero necesitaban un chavito que apenas estuviera empezando… ¡y yo daba ese perfil!! -A lo Mero Macho, ¿ni tu mismo te la creías? -No la verdad es que no, fue Fernando Schwartz quien me conectó y apoyó decididamente. -¿Qué tenia de especial ese programa? -Que no se hacia dentro de un estudio como tal, sino que se grababa en muy distintas locaciones. El primer programa lo hicimos en el Castillo de Chapultepec…-¿De qué era tu sección? -Se llamaba “Deporte juvenil”, puro deporte amateur, cuando yo había seguido puro deporte profesional, además, la información deportiva amateur siempre ha sido a cuenta gotas, mucho menos, había fuentes y batallaba un poquito, pero bueno, creo que pude realizar un buen trabajo… ¡así fue como empecé mi carrera dentro de la televisión en 1982!! -¿Te daban “ñáñaras” salir a cuadro? -Estaba totalmente novato y todo era aprendértelo de memoria… -No te puedes quejar, tienes una memoria prodigiosa… -No es para tanto, muchas gracias, creo que está más o menos… -¿Cómo le hacías para no equivocarte? -Iba y hablaba como a dos por hora… ja, ja, ja. -¿Te saliste con tu necedad de estudiar Contaduría? -Sí, para ello, ingresé a la Escuela Bancaria y Comercial… -¿Por qué demonios lo hiciste si en Canal 8 te estaba yendo de lujo? -Por influencia de mi papá -¿Te exigían una carrera como base sólida y después podías hacer lo que quisieras? -Eso, nunca me dijeron … ¡Tienes que hacer esto!! -¿Qué te ibas a morir de hambre de periodista? -Ja, ja, ja, tampoco me lo dijeron. Nada de eso mi querido Edmundo… -¿Fiel a tus convicciones?-¡Eso!! Yo mismo me decía una y otra vez, que no necesitaba estudiar comunicación y reflexioné que necesitaba un soporte profesional de carrera. Mi mejor amigo Carlos Gradwohl, quien también estudió Contaduría, así es que, como tenia varios alicientes, la influencia de mi papá, mi mejor amigo que estaba estudiando eso, así es que decidí por esa carrera de Contaduría. -¿Y la haz ejercido? -Fíjate que hasta en eso he tenido mucha suerte, porque se trata de una carrera muy práctica. Me iba a la EBC de las 7 a las 11 de la mañana, saliendo de clases, agarraba el Metro en la Glorieta Insurgentes con dirección a Balderas, en cosa de diez minutos ya estaba en Televisa Chapultepec. -Pero no me has dicho si ejerciste o no… -A partir del quinto semestre de la carrera, aprovechando que es una carrera muy práctica, los grupos nada más eran en la tarde, porque la mayoría de los chavos trabajaban en la mañana e iban agarrando experiencia, ya en la tarde, hacían lo demás. -¿Cómo le hacías para que el tiempo te alcanzara en la tele? -En efecto, yo me decía: ¡En la torre!!, porque para esas alturas, ya estaba haciendo transmisiones de la Liga Mexicana de Beisbol en Radio y se me complicaba mucho. -No cabe duda que eres un hombre muy afortunado… -Pasando de cuarto a quinto semestre de la carrera, abrieron un grupo por la mañana, así fue como pude llegar hasta el octavo semestre -¿Cómo fue tu debut en radio? -Debo confesar que empecé al revés… -¿Cómo está eso…? -Es que, regularmente, primero se hacía radio y luego tele, y yo, comencé haciendo tele y luego radio. Me acuerdo que había un excelente productor, Toño Rocha, quien era el responsable de elaborar las programaciones de los comentaristas. -¿Qué sentiste que te hayan designado para cubrir transmisiones de los Juegos Olímpicos del 84? -Antes que nada, un gran honor…

11:18 AM

-¿Cómo fue que sucedió? -Me acuerdo que estaba en la redacción en Televisa para el resumen de la noche junto con Pepe Segarra y otros chavos de la época… -¿Quién era el titular de ese resumen nocturno de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles ? -Guillermo Ochoa y nosotros hacíamos los guiones, entonces, Félix Sordo, un muy querido amigo quien falleció en el terremoto del 85, a quien quise muchísimo y creo que él también a mí. Luego, en el 85, se venía la Liga Mexicana de Beisbol -¿Siempre te ha gustado narrar el beisbol? -Sí, tan es así, que Toño Rocha, en el 85, me programa para que fuera el cronista de Los Tigres, así como de los Diablos Rojos de casa a través de la XEX, y en la XEQ, todos los partidos de gira. -¿Un periodista deportivo nace o se hace? -¡Uff!!, pues mira, te lo digo con toda la franqueza… ¡yo no me considero un periodista deportivo!!... -¿Pero un comunicador sí? -Un comunicador si te lo acepto… -¿Un narrador? -¡También!! y hasta te acepto que me definas como un simple comentarista… ¿pero que me llames “periodista deportivo”? ¡No!!, la verdad es que no… -¿Por qué no? -Porque debes reunir muchas características con las que, inclusive, debes nacer, y yo, no me considero un “periodista…” -Si no eres periodista, entonces dime uno… -Periodista… ¡Fernando Schwartz!!... un experto en cuestión de deportes al ciento por ciento -¿Qué tiene Schwartz que no tengas tú? -Insisto, un pleno conocimiento de todos los deportes, al ciento por ciento… -¡…Perdóname que te interrumpa!!, pero tú, no cantas mal las rancheras, eres muy culto y preparado en tu especialidad -Muchas gracias, pero honor a quien honor merece… -A lo Mero Macho, no entiendo cuál es esa diferencia que marcas…. -Yo creo que la única diferencia que tenemos con respecto… -Mi querido Enrique… ¿piensas que son gigantes en comparación a lo que tú realizas de manera tan brillante…? -¡Uff!, mi querido Edmundo, me pones en aprietos… Digamos que no, pero… vas a pensar que estoy divagando demasiado porque se me vienen a la mente infinidad de cosas, además, mira, me está haciendo señales el productor, ya tengo que entrar “al aire” en “Fórmula Deportiva” con Raúl Orvañanos… -Te lo voy a decir claro y preciso, si algo caracteriza a Enrique Burak en sus narraciones, es saber acompañar con elegancia, un entretenimiento que disfruta el televidente en casa… -Woow, muchas gracias. -Te la pongo más fácil… ¿En qué consiste la labor de un cronista deportivo? -¡Qué bonita pregunta!! Nuestra labor consiste en acudir a los escenarios para narrar los partidos y hacer nuestro trabajo de la manera más ágil y atractiva… -¿Entonces, en dónde demonios esta esa diferencia de la que hablabas? Como espectador, te lo digo A lo Mero Macho, es una delicia y un agasajo escuchar tus narraciones… -De pronto, su rostro enrojece levemente, con una leve sonrisa expresa: “Te lo agradezco mucho, la verdad es que, eso tiene que ver, primero… -Insisto, ¿Por qué te manejas en un bajo perfil si tu trabajo es impecable? -Yo creo que todos los que nos dedicamos a esto… ¡Uff!!, creo que debemos hacer una división… -¿…Entre quienes? -Entre los que tenemos una verdadera pasión por el trabajo que realizamos al narrar eventos deportivos. -¿Hasta cuándo te imaginas seguir haciendo lo que realizas de manera formidable? -Hasta que me sigan prestando la silla para seguir narrando… -¿Hay quienes nada más les gusta aparecer en la tele, pero de deportes no saben ni madres? -¡Uff!!, que pregunta tan fuerte!! Tienes muchísima razón, hay quienes nada más les gusta aparecer en la tele o en los medios… -Esos, tienen nombres y apellidos… -Enrique Burak no es un hombre de conflictos, pero respondiendo a tu pregunta, durante los últimos 40 años, me ha tocado ver un desfile, tanto en la tele como en los medios de comunicación como no tienes idea. -¿Se avientan como “El Borras”?

11:18 AM

-Es que, cuando ven los esfuerzos y sacrificios que se tienen que realizar por esta carrera de cronista deportivo, es decir, no tienes tiempo libre, dejamos a un lado infinidad de eventos y compromisos familiares. Una noche, tenemos que permanecer en el Parque del Seguro Social sin saber hasta qué hora, porque se suspendió el partido de beisbol por lluvia y esos “periodistas deportivos” se aburren… -En esta vida nada, pero nada es fácil… -¡Exacto!!, permanecemos solamente quienes nos apasiona esto, con las sabias enseñanzas de haber tenido el honor de trabajar con Fernando Schwartz, que lo primerito que te decía: ¿Tienes tu book history? Vamos, ni siquiera era un saludo de buenos días, sino que exigía que te preparas… ¡Obviamente!!, tenías que prepararte muy bien para hacer un digno papel frente al micrófono, las cámaras y narrar correctamente los partidos. -¿Qué sientes con esa gente falta de ética profesional? -Te repito, me ha tocado ver, a lo largo de los años, gente que llega preguntando literal… ¿Quién juega? Y todavía se atreven sentarse para narrar. Me preguntas ¿Cómo me siento con esas personas? No es que me sienta incómodo con ellos, sino que no me siento bien conmigo mismo. -¿Por qué contigo? -Porque te ves obligado a un enorme respeto con la gente que te ve y escucha en su casa, pero también, debes tenerte respeto a ti mismo, porque, con las “tablas” que tiene uno, la verdad, llegas y sacas el partido de manera adecuada y sin ningún problema. -Sin que te molestes conmigo y con el respeto que mereces, tú, no eres ningún mediocre… -No te preocupes, te lo agradezco, de ser así, le estaría fallando a la gente como a mí mismo…

“Quienes nos dedicamos a la crónica deportiva, nos tenemos que preparar de la mejor manera posible, los adelantos tecnológicos representan un enorme reto para quienes nos dedicamos a esto, por la inmediatez con la que fluye la información, es decir, cualquier persona, desde su celular, tiene los resultados de cualquier evento deportivo en cuestión de segundos ”, expresó el destacado cronista y comentarista deportivo Enrique Burak, en la tercera y última parte de la entrevista exclusiva que concedió a MISIÓN POLÍTICA. Un hombre profundamente agradecido con la vida. Amable y sencillo en su trato, transmite confianza y sinceridad en cada una de sus palabras. Al cuestionarle si alguna vez la ha “regado” durante sus transmisiones “al aire”, con absoluta honestidad y sin empacho, admite que han sido muchísimas las veces que le ha sucedió, pero también, ha tenido el valor de saber ofrecer disculpas al respetable teleauditorio, así como a los miles y miles de radioescuchas que los siguen en las emisiones radiofónicas en las que participa. A lo Mero Macho, es una delicia conversar con Enrique Burak, sumamente educado, con una sorprendente sencillez y calidad humana que le caracteriza y distingue, muy aparte de poseer de una riqueza cultural, no solamente en el ámbito deportivo sino en lo general, convirtiéndolo en un verdadero devorador de libros y de toda la información que pueda recabar sobre muy diversos temas. Enamorado de la vida, señala que dentro de la gama de eventos deportivos que ha tenido la suerte de cubrir, trátese de Juegos Olímpicos, Super Bowls, Series Mundiales de Beisbol, Series Finales de la NBA, Temporadas Regulares de la NFL, Ligas Nacionales de Futbol Americano, Mundiales de Atletismo, entre todos ellos, prefiere los Juegos Olímpicos porque detrás de cada uno de los diez mil atletas que participan y que vas a verlos competir, en cada uno, hay una historia, por la diversidad de deportes y porque participan los mejores atletas del mundo. Porque es un mosaico multicolor, multinacional, caminar por las calles y encontrar gente de todo el mundo… ¡Eso es lo que realmente le apasiona!! -sostuvo- Por último, al preguntarle qué sentía tener la oportunidad de colaborar dentro del exitoso noticiero “Ciro por la Mañana”, dijo: “Es un privilegio y un gran honor tener la posibilidad de trabajar con Ciro Gómez Leyva, uno de los periodistas más importantes en las últimas décadas en México. Un excelente y reconocido periodista y un símbolo de la pulcritud periodística” -¿Debido a los avances tecnológicos de internet y la inmediatez de la información, los cronistas deportivos están siendo rebasados? -¡Qué buena pregunta!!, sin lugar a duda, hay mucha gente que sabe mucho más que nosotros… -¿…A lo Mero Macho!! -¡Fácil!!, pero muy fácil -¿Entonces qué va a suceder? -Quienes nos dedicamos a la crónica deportiva, nos tenemos que preparar de la mejor manera posible. Los adelantos tecnológicos representan un enorme reto para quienes nos dedicamos al deporte, por la inmediatez con la que fluye la información, es decir, cualquier persona, desde su celular, tiene los resultados de cualquier evento deportivo en cuestión de segundos. -¿Alguna vez que hayas transmitiendo “al aire”, has sentido que “la cagaste”? -Ja, ja, ja… ¡Claro que sí y muchas veces!!... -¿Qué duele más, meter la pata o tener que ofrecer disculpas? -¡Uff!!, todo depende de lo que tengas que ofrecer disculpas y de lo que hayas hecho… -¿Existen errores que se pueden dejar pasar “al aíre”? -Mira mi querido Edmundo, hay errores que se pueden dejar pasar, pero también, hay errores que no… -Insisto… ¿Qué duele más? -Es que ambas cosas duelen. No no conozco a nadie que se quiera equivocar frente a las cámaras y micrófonos a propósito, cuando esto sucede, por dentro, te queda esa sensación de…”chin…¡ya la cagué!!...”

11:19 AM

-¿De quién depende que puedas llegar a cometer esos errores? -De uno mismo, pero a la vez, depende también del grupo de personas con quien estés trabajando. Te pongo un ejemplo, con Toño de Valdés y Pepe Segarra, con quienes he estado trabajando durante muchos años, a veces, la verdad, ¡la regábamos!!...-¿Cómo le haces para “sacar al buey de la barranca”? -La forma de sacar al “buey de la barranca”, como bien lo señalas, puede ser de una forma distinta… -¿Existen enemigos ocultos que aprovechan el mínimo error para darte una puñalada por la espalda? -¡Sin lugar a dudas!!, existen este tipo de personas para exhibirte, pero en este caso, si perteneces a un equipo de comentaristas y de verdaderos amigos, pues entonces, no puedes dejar pasar ese error, es decir, con una simple broma o una “muletilla”, subsanas el error y el público lo entiende perfectamente. -A lo Mero Macho… ¿Cuántas veces la has regado “al aire”? -A lo Mero Macho, la he regado una y mil veces… -Tu trabajo es digno de reconocimiento, así como me hiciste llorar de emoción, por lo que narre sobre la vivencia que la vida me permitió con Luís Echeverria… -Al contrario, mi querido Edmundo, lo que viviste con don Luis Echeverría siendo presidente de la República… ¡Qué historia!! -Mejor dime… ¿Qué es lo que te apasiona de unos Juegos Olímpicos, cuando son miles de participantes, y ahí, hay infinidad de historias detrás de cada uno de ellos? -¡Qué bonita pregunta!!, mira mi querido Edmundo, detrás de cada uno de los diez mil atletas y que vas a presenciar verlos competir, como bien lo dices, detrás de cada uno, hay una historia… ¡Eso es lo que realmente me apasiona!! Y tu historia con Luis Echeverría, te lo digo de corazón, realmente me cautivó, porque siendo un adolescente lograste meterte hasta las entrañas del poder presidencial en México, y además, el tamaño del personaje que era Luis Echeverría…. ¿o no? -Mejor sigamos, quien hace las preguntas en este momento soy yo… -Ja, ja, ja… Edmundo, eres todo un personaje. No sabes cómo me deleité leer esa extraordinaria historia tuya… ¡y eras casi un niño!! -¿En algún momento has sentido el deseo de tirar la toalla? -¡Sopas!!... ¡Qué curioso...!! -¿Por qué…? -Hace unos cuantos días, “en corto”, Ciro Gómez Leyva me hizo exactamente la misma pregunta que me estas formulando ahorita…. -¿Y…? -Mi respuesta que le di, y que te la vuelvo a dar, es que… ¡Todavía hay muchos platos que pagar!!... -¿La pasión con la que haces un trabajo extraordinario, también tiene una tarifa? -Sin esperarlo, mi nieto Adrián expresa en voz baja… ¡Abuelo, no seas manchado con Enrique Burak, es un tipo a toda madre!! Como respuesta, mi entrevistado levanta el dedo pulgar de su mano derecha en señal de agradecimiento hacia mi nieto y expresa… “La pasión de hacer esto, precisamente, ahora que estaba en Paris cubriendo los Juegos Olímpicos, caminando por el Centro Internacional de Transmisiones, que tenía una magnífica ubicación, además, con un fondo majestuoso como lo es la Torre Eiffel, me reafirmó ese cariño y la entrega por mi trabajo… -¿Te dijiste por dentro…. ¡De aquí soy, esta es mi vitamina del alma!? -¡Exacto!!, me dije… “De aquí soy” -¿Zapatero a tus zapatos? -Es que, realmente… ¡de eso estoy hecho!! -¿Qué te llena más narrar, unos Juegos Olímpicos, un Mundial de Futbol o un Super Tazón? -Indudablemente que los Olímpicos… -¿Por qué…? -Primero, por la diversidad de deportes y por que participan los mejores atletas del mundo. Porque es un mosaico multicolor, multinacional, caminas por las calles y encuentras gente de todo el mundo… -¿Tu amor por esta tierra bendita también, se hace presente? -¡Por supuesto!!, porque México participa y existen enormes posibilidades de figurar en los primerísimos lugares, obtener medallas, además, esa sensación de participación solamente se da cada cuatro años… -¿Y los Super Bowl? -Ahí, la cosa cambia un poco, es decir, si los derechos de transmisión los tiene la empresa en la que trabajas… ¡pues ya la hiciste!!, y los tienes a tu alcance cada año.

11:19 AM

Lo mismo sucede con la Serie Mundial de Beisbol… -¿Y los mundiales de futbol? -Yo no estoy involucrado en ello, el futbol no es mi pasión. Pero los Juegos Olímpicos me apasionan, atrapan y los disfruto como no tienes idea. Además, desde hace algunos ayeres, para ser exactos, desde los Juegos Olímpicos de Atenas hasta la fecha, Televisa me ha dado la honrosa oportunidad y responsabilidad de programar los eventos deportivos de los Juegos Olímpicos, dicho de otra forma, lo que ves en la tele, de juegos olímpicos, es mi responsabilidad programarlos.-¿Niño con juguete nuevo? -Ja, ja, ja, me encantan por donde lo veas -¿Existen los celos profesionales entre cronistas deportivos? -¡Puff, vaya que existen!!, mira, te lo voy a explicar, ser cronista deportivo es una carrera padrísima, pero también, está llena de muchas inseguridades… -¿Dudas si te vayan a enviar para que cubras ese tipo de eventos deportivos? -La verdad es que sí, nada está escrito en una televisora… -¿Me das a entender que un prestigiado cronista deportivo del tamaño de Enrique Burak, vive con “el Jesús en la boca”, sin saber que le espera? -Para qué te digo que no, si, sí. No estamos ajenos que llegue alguien mejor que tú, para realizar ese trabajo… -No me queda muy claro el tipo de “celos” entre ustedes mismos… -Esos “celos” son bárbaros por ganar exclusivas y tener la mayor audiencia, lo que se deriva en un mayor “raiting” para tu empresa, lo que se transforma en verdaderas luchas encarnizadas… -¿No será culpa de ese absurdo protagonismo proveniente de quienes aparecen en la tele? -Sin lugar a dudas, hay quienes se la pasan bla, bla, bla, bla y no dejan un solo minuto a los demás, pero eso… ¡no va conmigo!! -Te puedo asegurar que, si don Fernando Marcos viviera, aplaudiría todo lo que haces… -Muchas gracias por tus palabras, me emocionan enormemente. Fíjate que tuve la oportunidad y el honor de poder conocer y colaborar con don Fernando Marcos en estos mismos micrófonos de Grupo Fórmula… -Cuéntame eso por fa… -Era un programa que hacia el querido Beto Murrieta “Deportes y Toros”, en el que también participaban Nacho Trelles, León Krauze, Jorge Murrieta, Oscar Guzmán y quien habla… ¡perdón!!, se me escapaba Félix Fernández. Ahí fue en donde tuve ese acercamiento con Don Fernando Marcos y dialogar con él. -¿Qué sentiste estar frente a ese ícono del micrófono? -En un principio, me sentí totalmente intimidado, pero ya después y gracias al frecuente contacto, sentí un orgullo y una enorme alegría. La dicha de poder alternar con un gran señor como lo fue don Fernando Marcos. Tal y como me sucedió con Jorge Sonny Alarcón, y el “Mago” Septién… -¿Tuviste la oportunidad de conocer Al legendario Ángel Fernández? -Sí lo conocí, pero nunca tuve la suerte de alternar con él…. ¡Ay, Edmundo…!! -¿Ahora que hice?... ¡Hasta mi nieto me regaña…!! -¡Tranquilo!!, déjame contarte algo interesante. Televisa también me dio el honor y la responsabilidad de organizar la entrega del Trofeo Televisa Deportes, lo cual, era un verdadero suplicio para mí… -¿Suplicio?, suplicio debe ser para ti, estar frente a este reportero metiche y preguntón… -¡No!!, tampoco te me azotes. Bueno te contaba, tuve el orgullo de reunir en el mismo escenario a Hugo Sánchez, Julio César Chávez y Fernando Valenzuela, catalogados como los tres grandes del deporte nacional en los años ochenta, además, entregarle un muy merecido reconocimiento a su brillante trayectoria a don Ángel Fernández, quien, para mí, ha sido el número uno…” -Intempestivamente, comienza a sonar la alarma de Grupo Fórmula, los tres que estábamos en la pequeña sala de juntas, nos quedamos con cara de “what” sin saber si era alerta sísmica o contra incendios, rápidamente, Enrique se levanta de su sillón y consulta a la persona de seguridad afuera- -¡Falsa alarma!!, nos dice y continuamos… -¿Cómo estuvo se pequeño accidente en que, por poco, te nos vas para el otro mundo? -¡Toco madera!!, ja, ja, ja.

11:19 AM

Fíjate que fue previo a un Super Bowl aquí en México, Javier Alarcón que era nuestro jefe, nos propuso hacer un partido de futbol americano a Toño de Valdés y a mí… -¿Cuál fue tu reacción? -Que ya no estábamos en edad para hacer eso. Tratando de convencernos, Alarcón insistía que Toño y yo, éramos el rostro del americano en Televisa y nos equipó, pero sin saber quién era quién… -¿Qué posición te dieron? -De receptor, en eso, viene un pase largo, en lugar de quedarme ahí en donde estaba, ahí me tienes corriendo y se arma una carambola. Total, uno me cae en el tobillo, otro, en la rodilla derecha y… ¡crack!!, originan una palanca, teniendo como resultado doble fractura en la tibia y doble fractura en el peroné. Eso fue un viernes, pero el lunes siguiente teníamos que viajar a Miami para la transmisión del Super Bowl. -¿Pensaste cancelar el viaje? -¡No!!, al contario, estaba aferrado en ir. Total, me operan de emergencia, pero se complican las cosas, porque ahora, había un grave problema en los pulmones y literalmente…. ¡me estaba muriendo!! -¿Pensaste que ibas a “colgar” los tenis? -¡No!!, sino que son ese tipo de obstáculos que se te presentan. Si no fuera por esta chamba, no hubiera tenido la oportunidad de conocer tantos países… -Curiosamente, Enrique Burak es un hombre de mundo… -Ja, ja, ja, insisto, gracias a esta bendita chamba, la verdad, es que sí. -¿Qué te causa más placer… Narrar un partido o hacer el amor con tu pareja? -Totalmente sorprendido por la pregunta, deja escapar una sonora carcajada que seguramente se escuchó hasta la planta baja del moderno edificio… -Ja, ja, ja… ¡A lo Mero Macho, estar con mi pareja!! No he llegado a esos niveles, pero digamos que son satisfacciones totalmente distintas… ¿no? Además, la satisfacción de haber hecho bien tu chamba te deja un buen sabor de boca. -¿Es verdad que eres un auténtico tirano contigo mismo? -¡Vaya que sabes demasiado acerca de mi persona!! Algo que me ha aligerado un poco durante los últimos años, es exigirme demasiado y hasta perfeccionista…. Si, la verdad es que sí soy un tirano conmigo mismo, pero eso me ayuda como no tienes idea, al término de una transmisión, me sienta mucho muy a gusto con lo que hice. -¿Lo haces como si fuera la última transmisión de tu vida? -¡Exacto!!, jamás sabes cuando será la última, y que mejor, que haciéndolo bien. Como decía Pepe Segarra… ¡Vamos a divertirnos mis niños!! Eso es lo que tenemos que hacer, además, nos van quedando menos transmisiones que realizar… -¿Nada es para siempre? -¡Qué bonita entrevista!, no sabes cómo la he disfrutado… -Mejor dime… ¿Un cronista deportivo, tiene caducidad? -Yo creo que sí, sobre todo, si es que sus facultades comienzan a mermar, en donde ya no se tiene la misma agilidad… -Tú, tienes esa “chispa” y una estupenda memoria… -Si supieras, me llevo mis acordeones para cada partido que voy a narrar. Retomando tu pregunta anterior, hay gente que llega a cierta edad, en donde, ellos, deciden retirarse, pero hay otros a quienes los “retiran” -¿Hay Enrique Burak para rato? -Mientras me siga funcionando el “coco” al cien, el mismo gusto y la pasión por esto, pero lo más importante radica en que mientras me sigan dando chamba mis jefes… -¿Ese tono de voz lo conseguiste haciendo “gorgoritos” con mezcal? -¡No!!, ya te dije que no bebo alcohol, es obra de la naturaleza… -¿Con ese timbre de voz, eras muy “perro” para conquistar chicas? -No, para nada. Te repito, este timbre de voz se ha ido haciendo más grave con el paso de los años -¿Qué tiene Enrique Burak, que nunca ha estado metido en escándalos de ningún tipo? -Antes de responder, estira los brazos hacia arriba como tratando de implorar piedad y misericordia al infinito, me observa fijamente, suspira profundamente y me dice… “¡No sé!!... -¿Por qué ese suspiro, ya quieres que me vaya? -¡No!!, para nada, al contrario, me gustaría platicar más contigo. Ha sido una delicia esta charla, pero ya van dos veces que viene el productor y me hace señas que ya le “corte”, en tres minutos, voy “al aire” con Raúl Orvañanos…

11:19 AM

-¿Qué sientes tener una hija tan exitosa? -Mis hijos son el máximo orgullo, Tanya y Nathan. Tanya está involucrada en los medios y Nathan, en un pequeño negocio propio de diseño industrial, la verdad, ambos, son una bendición -¿De todos los medios en los que colaboras, en cuál te sientes como pez en el agua? -Es que son tan distintos que no sé qué responderte. Las veces que he colaborado para un medio impreso, debo aclararte que soy muy flojo para escribir, además, me atrapa el síndrome de la hoja blanca y es horrible. -¿Y la radio? -Lo que me gusta del radio, es que es mucho más íntimo con la gente, una retroalimentación inmediata. -¿Y la tele? -Creo que ha sido mi medio favorito de siempre. -¿Qué sientes cuando la gente te descubre en la calle? -No sé si me están confundiendo con alguien… Ja, ja, ja, déjame contarte que, durante muchos años, me confundían con Heriberto Murrieta. Me preguntas ¿qué siento cuando la gente me salide en la calle? Es algo mucho muy agradable, porque de alguna forma es un reconocimiento a tu chamba de tantos años. -¿Después de narrar un partido, te transformas en un ser terriblemente solitario? -Todo depende, si estamos aquí en México, es irme a la casa o me voy al cine… -¿Qué tipo de películas te atraen? -Esencialmente la comedia y hasta los Thrillers, pero no cintas de miedo ni de terror. También vamos a ver obras de teatro musicales -¿Crees que la televisión mexicana está viviendo sus últimos momentos? -No, no lo creo así. -¿Se mantiene viva gracias a los deportes? -También de las telenovelas. Tienes mucha razón, los deportes arrojan niveles de audiencia increíbles -Tu productor ya me está viendo feo… ¿Si entrevistaras a Dios, que le preguntarías? ¡En la madre!!... Que si habría alguna forma en que se hiciera más presente en este mundo tan convulsionado… -¿Cómo te acercas a ese Dios? -Para agradecerle por tener vida y una familia maravillosa. Mira mi querido Mundo, si volviera a nacer, te aseguro que volvería ser cronista deportivo y hasta te jalaría conmigo para que hicieras entrevistas a muchos deportistas. No me imagino verme detrás de un escritorio arrastrando el lápiz. -¿Qué sientes ser entrevistado? -Mucho muy agradecido por esta deliciosa conversación. Me hiciste recordar tantas y tantas cosas, te pusiste a escarbar y escarbar, la verdad, te felicito porque eres un excelente entrevistador. Me encanta leer tus entrevistas. Me hiciste sentir mucho muy a gusto -Al sentir la presencia de su productor a mi lado, le digo: Antes que te vayas, ¿Qué significa para ti, formar parte del equipo de colaboradores de Ciro Gómez Leyva? -Es un privilegio y un gran honor tener la posibilidad de trabajar con Ciro Gómez Leyva, uno de los periodistas más importantes en las últimas décadas en México. Un excelente y reconocido periodista y un símbolo de la pulcritud periodística. Quien, además, en su espacio, es el más escuchado en la radio. De tal manera, para mí, es un auténtico aliciente poder estar ahí y colaborar con él, pero, sobre todo, por el tiempo que me brinda y la posibilidad de interactuar con él, porque le gustan mucho los deportes. No es como varios conductores de noticieros, en donde establecen un monólogo, sino que, con “Ciro por la Mañana”, existe una deliciosa interacción porque le entiende al deporte y le gusta. Es una enorme oportunidad que me ha brindado la vida poder estar colaborando con Ciro, pero, sobre todo, cultivar esa cercanía de amistad durante muchos, pero muchos años. Al momento en que el productor del programa “Formula Deportiva” lo obliga suspender la entrevista, a manera de despedida, nos brinda un afectuoso abrazo a este reportero y a mi nieto Adrián que me acompaña y toma las fotos de las entrevistas, quedándonos con una muy grata impresión por su enorme calidad humana y profesionalismo.