• Tlaxcala

• Redacción
• 04 abril 2021

Por: Luz Aurora Cunyarache Andino

Así lo demuestra el porcentaje alto de peruanos que a puertas de los comicios presidenciales aún no han saben por quién votar. Cifra que a estas alturas pelean tanto analistas, asesores y los mismos candidatos que se preguntan porque ninguno logra convencer a los votantes para que tomen esa decisión de elegirlos a ojos cerrados como su nuevo presidente.

Y es que celebrar elecciones presidenciales en medio de una pandemia y estado de emergencia sea vuelto preocupante para muchos, nos solo por la digitalización de las campañas y el poco tiempo que tuvieron para desarrollarse, sino porque la cuarentena ha dejado a mucha gente en estado de supervivencia en temas claves como la salud, la pobreza y el empleo.

Hasta junio del año pasado en el Perú superaban los 6 millones de desempleados y la población ocupada se redujo un 39,6 %, según datos ofrecidos por el Instituto Peruano de Economía para la Organización Mundial del Trabajo, OIT. Pero en este dato no estaría incluido el número de desempleo informal que es mayoritario en el país (72%), con lo cual se estima que a la fecha el número de desempleados sea mucho mayor.
Por otro lado, el número de población vulnerable que busca sobrevivir tras ser afectados por la falta de dinero se elevó del 20.2%, en 2020 ha 34%, es decir pasamos de 6,4 millones de pobreza monetaria a más de 11,2 millones que son afectados económicamente producto de la pandemia; según dio a conocer la economista Carolina Trivelli en su explosión del CADE Ejecutivo 2021.

Quizá ese 34% de indecisos que muestras las encuetas tiene otras preocupaciones que le impide parase a analizar las propuestas que muy pocos candidatos han sabido trasmitir a través de las Redes Sociales. O quizá además de estar buscando los ingresos para comer, están centrados en cómo reabrir el negocio que fue cerrado en cuarentena, en cómo pagar el préstamo del banco, en cómo evitan contagiarse cada vez que salen a vender las mascarillas a la calle, o en cómo conseguir oxígeno y evitar los “hospitales de la muerte” como se los llama los hospitales públicos luego de pandemia.
Además del desinterés de la población, estas elecciones se desarrollan en medio del temor de la segunda ola del Covid-19 y el alto número de contagios y fallecidos. El Sistema Nacional de Defunciones, (Sinadef) encargado del registro de fallecimientos por cualquier causa en el Perú, señaló que hasta finales de febrero de 2021 se produjeron 109.943 muertes, mientras el número de contagios supera los… por día.
El reto para cualquiera de los 18 candidatos que postulan a la presidencia parece estar claro, sin embargo, el último debate no logró impactar lo suficiente en esos temas que hagan girar la mirada de ese alto porcentaje de peruanos, como tampoco el 20.2 % que señala que anulará el voto antes de votar a un candidato que no lo representa.

A 10 días del proceso, los candidatos parecen ajenos al sentir de ese porcentaje de gente enojada e indiferente que aparece en los sondeos. Muy por el contrario, han enfocado las propuestas en temas demagogos como traer recuperar un barco perdido en la guerra de pacífico, fabricar vacunas en el país para inmunizar a todos, pena de muerte, etc. Otros basándose en esas necesidades de la ciudadanía, ofrecen desesperadas y peligrosos como ofrecer bonos a los más pobres, subsidio para todos como si unos 700 soles podrían sacar de la pobreza extrema en la que se encuentra un 3,5 % de la población.

Preocupa que en un tema importante que busca cambiar el rumbo del país, los peruanos hayan dado la espalda para enfocarse en temas vitales de supervivencia a causa de la pandemia, sumado al descreimiento en una clase política que en los últimos 5 años pasó a dado muchos reveces que ayudaron a generar la crisis que hoy vivimos, más allá de lo generado por la pandemia.