Asisten Marco Mena y Sandra Chávez a concierto de reapertura del teatro Xicohténcatl

Asisten Marco Mena y Sandra Chávez a concierto de reapertura del teatro Xicohténcatl

El Gobernador Marco Mena y la Presidenta Honorífica del Sistema Estatal DIF, Sandra Chávez Ruelas, asistieron al concierto de reapertura del Teatro Xicohténcatl, en reconocimiento a la trayectoria del pianista y compositor tlaxcalteca Roberto Pérez Ortiz.

El recital que estuvo a cargo de la maestra Alicia Flor Torres Mejía y la ex alumna de la Escuela de Música del Estado (EMET), Mabel Mendoza Bello, se celebró en las renovadas instalaciones del Teatro Xicohténcatl.

Previamente, el Director General del Instituto Tlaxcalteca de la Cultura (ITC), Carlos Bretón Jiménez, reconoció al Gobernador Mena y a la Presidenta del DIF Estatal por el respaldo incondicional que han mostrado a la cultura y las artes del estado, y el apoyo para la remodelación integral de uno de los recintos culturales más representativos y emblemáticos para los tlaxcaltecas.

“Hoy contamos con un Teatro restaurado, impecable, moderno y funcional que respeta su originalidad y belleza, el cual se suma a los recintos culturales y museos que se convierten en espacios de turismo cultural y de reactivación económica”, sostuvo.

Roberto Pérez Ortiz nació en el municipio de Xicohtzinco el 28 de enero de 1948, inició sus estudios musicales en la academia del maestro Rogelio Ránsoli, en la ciudad de Puebla, donde fue alumno del gran pianista y maestro Carlos Vázquez e hijo adoptivo del padre de la música mexicana: Manuel M. Ponce.

Fue fundador y maestro de piano en los Primeros Talleres Musicales en la Casa de la Cultura de Tlaxcala entre los años 1976-1980, fundador y titular de las clases de piano, armonía y composición de la academia “Roberto Pérez Ortiz” en la ciudad de Uruapan, Michoacán y fundador del Centro de Apoyo a Músicos sin Atril de Tlaxcala (Camsat), actualmente la EMET.

Entre sus destacadas composiciones se encuentran “La misericordia del Señor es eterna” que consta de 53 cantos litúrgicos, y “A dónde iremos, Señor, si sólo tú tienes palabras de vida eterna”.

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